Si hay algo que todos tenemos es un mahón en el clóset. Uno básicos azul oscuro basta para un outfit formal, y otro rasgado para un "look" más atrevido.

No obstante, estos no solo difieren en estilos y colores, sino también en precios. Mientras puedes hallar alguno que cueste menos de $30, en tiendas de diseñador y en el extranjero podrías encontrar otros que alcance incluso los $500. Pero, ¿a qué se debe la abismal diferencia de montos?

Para entender esto es importante saber que el rango de precios de los mahones no solo tiene que ver con la marca que adquirimos, sino también con la tela que se ha empleado para su diseño. Antes de los años 50, el denim era fabricado en telares de lanzadera que confeccionaban telas finas con las características orillas blancas, brindando más estabilidad y resistencia a la pieza.

Luego de aquella época, el uso de los mahones se popularizó y con ello también se buscó una forma de producción más rápida y de menor costo. Por ese motivo, se comenzaron a emplear telares de proyectil para su fabricación. Las telas confeccionadas perdieron las famosas orillas blancas, volviendo al denim más propenso al desgaste y la desintegración.

En los años 80, sin embargo, marcas como Levi’s y Wrangler volvieron a apostar por una producción de mahones de calidad, trayendo de vuelta los telares de lanzadera y definiendo a este tipo de denim como "selvedge".

El costo de los mahones "selvedge" es más caro por el tipo de tela empleada para su fabricación, que tarda hasta tres veces más que la producción de una tela denim convencional. 

Mahón con doble costura coloreada. (Shutterstock)

Para estar completamente segura de que tus mahones son de calidad, solo basta con fijarse al reverso de ellos y comprobar si hay una doble costura coloreada. Generalmente, los colores van acorde a la marca, por ejemplo, Levi’s usa el color rojo y Wrangler emplea el amarillo.