Camille Burckhart Portela es vicepresidenta ejecutiva y Chief Information and Digital Officer del Grupo de Innovación, Tecnología y Operaciones de Popular, Inc. Aparte de todo esto, es esposa y mamá de Marcos y Elena.

“El título yo creo que es más largo de lo que debería ser. Yo en realidad lo que hago es ayudar a correr la tecnología y las operaciones del Banco Popular en Puerto Rico y en los Estados Unidos”, señala quien tiene a su cargo a 800 empleados, que hacen que el banco funcione. “Yo digo que somos el ‘behind the scenes’”.

En la actualidad, está involucrada en actividades y organizaciones que integran a mujeres en las ciencias y tecnología. 

“Yo empecé por finanzas, pero me di cuenta en el proceso que no estaba muy segura de por qué estaba haciendo eso, como todos los estudiantes que llegan a la universidad y no tienen ni la más mínima idea de lo que quieren hacer. Tomé una clase de ‘e-commerce’ y simplemente cambió mi vida. Ese verano trabajé en el Banco Popular en un programa de internado, porque aún no existía el concepto de digital. Estoy donde estoy gracias a esa clase”.

Hay una escasez de empleados en el área de tecnología. ¿Por qué ocurre? 

Yo creo que todas las compañías hoy día son compañías de tecnología y se han dado cuenta del valor que tienen las personas que tienen un trasfondo de ingeniería o cualquier afinidad con tecnología. Hay muchísima demanda para esos recursos y, afortunadamente, nuestros estudiantes de Puerto Rico de ingeniería son supercodiciados por muchas compañías globales y vienen a Puerto Rico y los reclutan muy temprano en sus carreras. Cómo atraer talento técnico es un reto para nosotros y por eso estamos bastantes activos en la comunidad para que la gente sepa las cosas que estamos haciendo. Damos clases de coding a muchachos de escuela superior, es una invitación abierta para estudiantes de 12 a 17 años. 

¿Se ve una diferencia en términos de representación de género?

Sí. Ya desde esa edad es impresionante la cantidad de varones y las pocas nenas que hay. Hay muchos varones inclinados con el tema de gaming. Yo creo que el gaming ha despertado mucho el interés de estudiar ingeniería. Pero sí, muchos más chicos que chicas. 

¿Crees que esfuerzos como los de Women Tech Over están teniendo algún impacto positivo en esa brecha entre mujeres y hombres en el mundo de la tecnología? 

Yo creo que sí. No te puedo decir que yo he visto un cambio radical a nivel de la estadística, pero ojalá estemos sembrando las semillas que van a hacer que ese número cambie. Cada vez que voy a uno de estos eventos salgo emocionada e inspirada con la cantidad y el nivel de talento de muchachas que se están dando cuenta que éste también es su mundo. 

Tu mamá siempre trabajó; tuviste ese ejemplo de una madre trabajadora en tu crianza. ¿Cómo crees que eso te impactó? 

Creo que cuando te crías en una casa en donde ambos padres trabajan, es raro que consideres otra alternativa. Yo nunca consideré el no buscar una carrera. No lo niego que me tomó muchos años aceptar que, a pesar de mi rebeldía y de creerme que era la más creativa, trabajar en una compañía bancaria. Yo siempre digo que no soy banquera, soy tecnóloga. Pero la realidad es que yo llevo al Banco Popular en mis venas, mi mamá trabajó allí por muchísimos años en una posición muy alta y fue una persona muy exitosa que rompió con muchos de los esquemas que existían antes. Ella fue de las primeras mujeres en pertenecer al grupo gerencial ejecutivo del banco. Hay gente que me dice: “Tu mamá fue una inspiración”, y la verdad es que es un honor yo poder seguir sus pasos. En lo personal, nunca me faltó la presencia de mi mamá en mi desarrollo. Ahora como mamá, y que a todas las mamás nos pasa esto, el cargo de conciencia que uno tiene por cualquier cosa que uno se pierde, ya sea algo pequeño o el juego más importante, porque uno no se quiere perder nada. 

¿Qué te inspira a alzar la voz? 

Mis hijos; que ellos sepan que se puede hacer lo que sea que uno se proponga. 

(Las autoras son moderadoras del espacio ‘Alzando la voz’, que se transmite los sábados a las 8:00 p.m. por WKAQ580. También puedes escuchar los episodios en formato de podcast en las plataformas de Uphoria, iTunes y Apple Podcasts).