El cierre ocasionado por el COVID-19 dejó a muchos puertorriqueños sin empleo, incluyendo a Giovanna Vázquez Cotté, quien no se quedó sentada lamentándose, sino que decidió emprender a través de la cocina, donde está su mayor talento.

Así nacieron los Pastelitos de Arroz Mamery, una sabrosa propuesta culinaria que fusiona el grano con un guiso de carne, pollo o vegetales, envueltos en hoja de plátano o guineo y que representa uno de los platos típicos de su pueblo, Comerío.

Sin embargo, al principio Giovanna no estaba tan convencida de que su sazón gustaría a otros, además de su familia y amigos que ya enloquecían con su comida.

Fue la esposa de su padre, Rosa Ortiz, la que convenció a Vázquez Cotté de adentrarse en el mundo de la gastronomía, como un modo de llevar el pan a su hogar, integrado por sus tres hijas.

“La esposa de mi papá, tiene su negocio de pastelitos de arroz en el sector Guavate de Cayey. Es la que me invita a confeccionar pastelitos de arroz. De primera instancia, no estaba muy segura de poder hacerlo, pero fui a aprender y ver el proceso completo”, relató la hija de Mildred y Eusebio Vázquez.

“Entonces, me dije: ‘Vamos a intentarlo. ¿Por qué no?’ Estuve con ella en varias ocasiones hasta que decidí hacerlos por mi propia cuenta y entonces, ella me apoyaba”, sostuvo la fémina de 52 años.

De esa manera, Giovanna comenzó a llevar su oferta culinaria a diversos festivales culturales en toda la Isla, entre estos el Festival Jíbaro Comerieño, Festival de la Loma del Tamarindo y el Festival de la Puertorriqueñidad, así como otros eventos en Toa Alta y Dorado.

“Mi kiosco se llama ‘Pastelitos de Arroz Mamery’, en honor a mi abuela que me crió. Ella se llamaba María y de cariño le decían Mery. De pequeña, los uní y la llamaba así”, recordó la comerieña que es secretaria de profesión.

Entonces, “decido ubicarme, ir a ver cómo saldría mejor, si en un espacio fijo. Ahí me orientan sobre un espacio en la PR-167 de Comerío hacia Bayamón, en lo que era Puente Plata. Allí estoy desde febrero, los sábados y los domingos de 10:00 de la mañana a 1:00 de la tarde”.

“Ahora mismo, mi entrada completamente son los pastelitos de arroz. Los vendo hechos, me llevo todo cocido y ahí los despacho, pueden comer ahí. Se venden individual y por docenas”, explicó al mencionar que cuenta con una ayudante, Brenda Rivera Cintrón.

Igualmente, calificó la respuesta de la gente como “bien buena”.

“Me he quedado anonadada, porque realmente era un espacio que no me conocían. En estos años, lo que he hecho es desde mi casa, por encargo. Ha sido una bendición en mi vida, porque realmente, al principio empecé con cierta cantidad, pero al darme a conocer, he tenido que aumentar la producción”, apuntó.

“Nunca me visualicé como emprendedora. Ahora mismo, quizá eran habilidades que no sabía que tenía. Todo el mundo habla de mi comida, pero solo a mi familia, pero para la venta, no me había dedicado a cocinar para otra persona”, confesó.

Giovanna se prepara para tener su propia fábrica de pastelitos de arroz, con el propósito de aumentar la producción y venderlos a colmados y supermercados en distintas partes de la Isla.
Giovanna se prepara para tener su propia fábrica de pastelitos de arroz, con el propósito de aumentar la producción y venderlos a colmados y supermercados en distintas partes de la Isla. (Isabel Ferré Sadurní)

Receta de su abuelita

El secreto de los pastelitos de arroz que hace Giovanna se desprende de una receta creada por su abuelita, aunque le da un toque personal. Todo en un proceso artesanal, desde que se corta la hoja de plátano o de guineo y se amortigua, en una medida aproximada de cuatro a cinco pulgadas.

Vázquez explicó que el arroz se prepara en crudo. Luego se elabora la carne que, en su caso, utiliza pernil, pollo o vegetales.

“Son dos guisos. Se monta la cantidad de arroz en la superficie de la hoja, se le monta la carne, después se unen la carne con el arroz y se envuelve el pastelito, se amarra y ya está listo para cocinarlo”, detalló la empresaria nacida en la calle Cuba Libre de la barriada Cielito.

Asimismo, aseguró que sus comensales quedan encantados, tanto los boricuas como aquellos que la visitan en el kiosco.

“En Guavate, recibía gente de todo Puerto Rico y del mundo. Me visitó gente de España, Guatemala y Panamá. Lo sé, porque me gusta conversar con el cliente. Igual que en el Festival Jíbaro Comerieño”, mencionó.

Finalmente, Giovanna adelantó que se prepara para tener su propia fábrica de pastelitos de arroz, con el propósito de aumentar la producción y venderlos a colmados y supermercados en distintas partes de la Isla. Esto, además de crear empleos para su gente.

Para detalles puede acceder a Pastelitos de Arroz Mamery en Facebook o llamar al 787-586-2689.