Santa Isabel. Desde pequeña, Sherly Gastón Bonilla se embelesaba con el rico aroma que todos los días salía de la cocina de su mamá, Irma Bonilla Torres. La niña acostumbraba observar fijamente la combinación de ingredientes y las recetas que celosamente seguía su progenitora para complacer el paladar de la familia. Y así, poco a poco, desarrolló sus destrezas culinarias hasta hoy, a sus 41 años, cuando se convirtió en propietaria de un “food truck” de comida criolla, que decidió ubicar en el patio de su casa, en el sector Paso Seco.

Fue a finales de septiembre de 2020 que Sherly, junto a su hermana, Jaqueline Santiago Bonilla, y su madre decidieron dar forma al sueño de crear El Punto Criollo, que tras año y medio de operación se ha convertido en la esquina favorita del sector y de decenas de visitantes de otras partes de la Isla.

“Mi motivación fue mi barrio. Todos los negocios, casi siempre, están fuera de los barrios. La motivación fue crear empleo a la gente de mi barrio. Crear turismo dentro de un barrio y hacerle saber a las personas que, no porque seamos de barrio, no tenemos talento”, dijo Sherly en una entrevista vía telefónica desde Pennsylvania, estado donde reside hace más de cinco años y desde donde dirige el local.

Son doña Irma y Jaqueline quienes tienen la encomienda diaria de complacer el gusto de los clientes que llegan hasta el “food truck”.

“Para mí lo más importante es que les brinden la oportunidad a los pequeños comerciantes porque casi siempre se enfocan en los restaurantes grandes, cuando hay mucho talento en la carretera. Como los ‘food truck’ “, destacó.

Para muchos, involucrar a la familia en los negocios suele ser complicado. Sin embargo, en el caso de las Bonilla, el trabajo en equipo, la buena comunicación y el apoyo ha sido la fórmula para continuar elevando el negocio.

La mayoría de los platos son creados por Sherly, quien suele comunicarse con su madre y hermana a través de videollamada para enseñarles a montarlos. En otras ocasiones, cuando se encuentra de visita en la Isla los diseñan juntas.

Aquí sí se come bien

Las frituras son las protagonistas de su delicioso menú. Entre los aperitivos se encuentran las famosas ayaquitas de Irma, los mozzarella sticks, las papas supreme, empanadillas, sorullitos y los curiosos platanachos.

Una favorita es La Viajera: una caja de pizza repleta de frituras.
Una favorita es La Viajera: una caja de pizza repleta de frituras. (XAVIER GARCIA)

Como platos principales tienen carne frita, churrasco, pechuga al ajillo, el Vaso Loco, el Boricuazo, El Caribeño, Llévatelo Todo y el Mar y Tierra. Cada pedido puede ir acompañado de mofongo, arañitas, barquilla o canasta de plátano y papas fritas.

Los preferidos de los clientes son los surtidos. En especial, la Viajera, una caja de pizza que lleva en su interior sorullitos, mozzarella sticks, tostones, mofongo, empanadillas, ayaquitas, carne frita, chicharrones de pollo, papas wedge, palitos de yuca, cordon bleu y canastas de pollo.

El Punto Criollo II

“El sueño de ella (Sherly) es tener su restaurante grande: un local que tenga mesas. Ese es el sueño de ella, y lo va a lograr. Poco a poco lo va a lograr”, expresó la madre convencida de que el anhelo de una de sus hijas está próximo a hacerse realidad.

De hecho, Sherly se encuentra en el proceso de permisología para la apertura de lo que será “El Punto Criollo II” en Scranton, Pennsylvania. Por el momento, prepara varios de los platos desde su hogar y los vende a clientes que viajan desde diferentes partes del estado a degustar sus creaciones.

La variedad gastronómica para la comunidad latina en el estado es escasa, aseguró. Su misión en los Estados Unidos es satisfacer el paladar de los latinos, por lo que su menú se extiende hasta la comida dominicana y mexicana.

La orgullosa santaisabelina no descarta abrir nuevos locales en Puerto Rico, pero por el momento se encuentra enfocada en su primer negocio. “Mi motivación más grande es mi barrio y quiero que todo el mundo sepa lo que es Paso Seco”, añadió.

El Punto Criollo se encuentra en la calle 13 #326, en el barrio Paso Seco, en Santa Isabel. Opera de viernes y sábado de 3:00 a.m. a 10:00 p.m. y domingos de 12:00 a 9:00 p.m. Pueden comunicarse a través de su página de Facebook como El Punto Criollo o llamando al 787-601-3224.