Al cumplir un año de la repentina muerte de su hijo, justo esa mañana, la motivadora y comediante puertorriqueña Shayla Rivera despertó y lo escuchó: “Mami, tienes que soñar otra vez”.

Esas palabras la pusieron de pie física y emocionalmente, y comenzó a soñar de nuevo. Tomó una libreta y volvió a preguntarse cuáles eran sus sueños. Uno de estos, presentar un show de stand up comedy en HBO.

La primera semana de octubre estrenó el show con el título “It’s Not Rocket Science”. Previo a este logro, la carolinense de 59 años, radicada en Texas, se dio el espacio para desahogar su tristeza y replantearse la comedia en un momento en el que la risa había perdido el sentido.

“Es una pérdida increíble, que nunca va a pasar, especialmente si eres puertorriqueño y eres puertorriqueña y eres madre ya sabes que cuando pierdes tu hijo, no hay nada peor, y sí sé que la risa es una cosa que sana, y siempre lo he dicho a todo el mundo. Pero lo interesante es que para poder entender cómo pasar una cosa así, tienes que tener tu propia experiencia”, dijo Rivera, también madre de una hija.

“El asunto fue que cuando lo perdí, se me perdió el deseo de hacer a la gente reír. No vi la importancia a eso, y te empiezas a enfocar en otras cosas y esa no era yo. Y al año de su muerte, recuerdo que era el aniversario, me levanté con él en el oído, y diciéndome, 'Mami, tienes que soñar otra vez; Quiero que sueñes, quiero que luches, que sigas pa’lante, porque él siempre me vio luchando”.

Esta amante de la salsa grabó el especial sin mucha expectativa respecto a su performance. No sabía lo lejos que estaba de la realidad.

El proyecto le ha servido para ampliar su alcance como comediante de stand up y reconectar con el público, mayormente femenino, que la sigue.

La habilidad para hacer reír no es su único talento. Lo interesante es que lo descubrió desde un camino profesional muy distante del ámbito artístico. Shayla estudió ingeniería e ingresó a trabajar en la NASA desde ese marco de especialización.

De ese escenario, saltó el campo de las ventas, donde además comenzó a formarse como oradora, ofreciendo talleres de manejo de estrés a nivel corporativo.

“Ahí fue que la gente me dijo, ‘deberías tratar de hacer comedia’, y yo, pero ‘cómo va a ser', y lo gracioso es que cuando le dije a mi papá que iba a ser una comediante, me dice, ‘eso es lo que debías haber hecho desde el principio’”, relató la además profesora de ingeniería.

Cuando llegué a Estados Unidos, empecé a oír y aprender que era latina, que era mujer de la minoría, que no era blanca ni era negra, era olive, o sea, aceituna, hasta verde caí; en ese momento me di cuenta que no crecí con eso"

-Shayla Rivera, motivadora y comediante puertorriqueña

Su primera presentación en el género del stand up comedy fue en 1993. Sus monólogos se nutren de sus vivencias y observaciones. “Nací y crecí en Puerto Rico y seremos parte de Estados Unidos, pero somos completamente distintos. La comedia es distinta, la música es distinta, el meneo es distinto y me da gracia ver cómo somos diferentes... Así que para mí siempre ha sido una cosa de echarle luz a eso”.

Actualmente trabaja en su primera publicación, aunque si la invitan a bailar salsa, siempre tiene tiempo.