El problema de adicción y sobredosis de los opioides, que pueden desencadenar en muerte, es una de las tragedias de salud pública más grandes que se enfrenta en Estados Unidos. En Puerto Rico el problema está tocando la puerta de muchas familias y debe ser una prioridad evitar que entre.

“Sabemos que muchas personas que abusan de los opioides de prescripción médica informan haberlos obtenido por un amigo o un familiar. Si cada hogar se deshiciera de los analgésicos opiáceos una vez que dejan de ser médicamente necesarios para el propósito para el cual fueron recetados, esto tendría un gran impacto en la crisis de los opioides que sufren las familias”, afirmó la Dra. Amy Abernethy, subcomisionada principal de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA).

Los opioides de prescripción médica son fármacos potentes para reducir el dolor que pueden ayudar siempre y cuando se receten para el padecimiento correcto y se usen como es debido. Sin embargo, cuando se usan de manera indebida o se abusa de ellos, estos medicamentos pueden causar daños graves, como adicción, sobredosis y la muerte.

“Tanto adolescentes como adultos acceden a los opioides por primera vez al encontrarlos en los botiquines de sus padres, familiares y amigos. Hay millones de pastillas de opioides sin usar que no debieran estar disponibles ni a la mano en nuestros hogares”, advirtió el Dr. Douglas Throckmorton, M.D., subdirector de programas de control del Centro de Evaluación e Investigación de Medicamentos de la FDA.

La morfina, la codeína, el Percocet, la heroína, la buprenorfina y la metadona son algunos ejemplos de opiáceos.

“La alerta (en Puerto Rico) es por (sobredosis y muertes) por opioides y opiáceos, lo que incluye heroína, fentanilo y medicamentos recetados, siendo Tramadol (opiáceo) el más recetado”, señala Suzanne Roig Fuertes, de la Administración de Servicios de Salud Mental y Contra la Adicción (Assmca) y añadió que el 18 % de los medicamentos recetados son de la familia de los opioides.

Debido a que “los opioides son un tratamiento importante y efectivo para el manejo del dolor agudo, se deben utilizar con cautela porque pueden ser muy dañinos y adictivos si se utilizan en dosis más altas y por más tiempo del necesario”, explicó, por su parte, el doctor Rafael Rodríguez, secretario de Salud de Puerto Rico.

Por ello, el titular exhortó a los usuarios de estos medicamentos a ser cautelosos y a familiarizarse con estos, pues aunque son efectivos para el manejo del dolor en ciertas circunstancias, podrían ser muy dañinos, adictivos y hasta causar la muerte si son usados con frecuencia.