Aquí, en los Niuyores donde vivo, la gente no entiende eso de que yo soy la changa en cuatro patitas. Pero ustedes, que son boricuas como yo, ya se imaginarán a qué me refiero. Me llamo Lola y soy una chica supertraviesa. Cuando no me están velando, me entretengo mordisqueando los materiales de trabajo de mi mamá. ¿Y a papi? ‘Ndito, a ese no le queda ni un solo gabete sano en sus zapatos, ja, ja, ja. Soy chiquita (Chihuahua de solo cuatro meses), pero tremendita, ¿no les parece?