A pesar de su reputación de que no les gusta el agua, a muchos felinos les encanta jugar con ella. Como bien lo reseña Arden Moore, en su libro "The Cat Behavior Answer Book", existen muchas teorías -así como leyendas urbanas- acerca de la supuesta aversión de los gatos al H2O, pero lo cierto es que nadie sabe de dónde, exactamente, es que proviene la noción. Lo que sí se cree es que la atracción que algunos gatos sienten hacia el agua corriente -entiéndase, que fluye por un río o quebrada, o que sale a chorros de la llave del fregdero o el lavamanos- es que es la misma es un vestigio de su pasado silvestre, desde mucho antes de que fueran domesticados.

Los estudiosos piensan que esto es así porque los animales aprendieron que el agua que corre -versus la que está estancada- contiene menos contaminantes y, por eso, la prefieren.

En cuanto a los gatos que les gusta lapachar con agua en un recipiente, ya bien sea un cubo o una fuente, los científicos creen que es una manera de medir la profundidad del agua y calibrar la seguridad de la misma (por ejemplo, que no vaya a salir "algo" desde el fondo del recipiente a atacarlos).

 En cualquier caso, si notas que a tu gato o gata le gusta jugar con agua, provéele un envase grande lleno de agua fresca para que se divierta con ella o permítele que juegue un ratito en el lavamanos. Te garantizamos que tú te vas a divertir tanto como tu mascota.

Fuente: www.care2.com