Albinismo: cuando el sol es tu peor enemigo

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 15 años.
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Todos hemos conocido a una persona albina en algún momento de nuestras vidas porque el albinismo no distingue entre razas o nacionalidades. Sin embargo, pocos sabemos lo que implica padecer esta condición, sobre todo en un país tropical, como el nuestro, donde el sol es implacable prácticamente los 365 días del año.
Entre las muchas nociones erróneas que se tienen sobre el albinismo está la creencia generalizada de que absolutamente todos los albinos tienen el cabello rubio, casi blanco. La mayoría también cree que, obligatoriamente, deben tener la piel tan clara, que casi parece desprovista de color y que los ojos, también, tienen tan poca pigmentación que se ven casi rosados.
Al respecto, la genetista María del Carmen González Ríos señala que “el albinismo es un trastorno hereditario autosómico recesivo, debido al cual el paciente tiene un problema con la producción de melanina”. Esto quiere decir que en el mapa genético del paciente, existen dos copias del gen del albinismo y por eso la persona desarrolla la condición. La melanina, a su vez, es la sustancia producida por unas células llamadas melanocitos, y es lo que da la pigmentación a la piel, los ojos y el cabello.
“Hay diferentes tipos de albinismo”, añadió la experta, “y se han descrito más de siete tipos que afectan la piel y ojos”. Por otro lado, “hay otro tipo de albinismo que afecta los ojos nada más”.
Por qué ocurre
“Se han descrito diferentes cambios en el genoma humano”, abundó González Ríos, “que causan que los diferentes pasos para producir melanina en el organismo se puedan alterar”. Como resultado, el cuerpo no genera la melanina necesaria para proteger la piel, los ojos y el cabello del impacto de la luz solar y los rayos ultravioleta.
Como es de suponer, esto pone a los albinos en alto riesgo de cáncer de la piel, entre otras enfermedades. Por eso, ahora que se acerca el verano y que abundan más los días de fiero sol, es de vital importancia que este sector de la población sea consciente de las precauciones de rigor que deben tomar para no afectar su salud ni su bienestar.
El cuidado de la piel albina
El clásico paciente de albinismo no tiene pigmentación suficiente para protegerse de los rayos ultravioleta del sol. Por ello, el dermatólogo Alexander Lugo Janer observó:
“Los albinos están en constante riesgo de sufrir daño solar severo y de desarrollar lesiones precancerosas y cancerosas, especialmente en las partes de la piel expuestas al sol”.
De hecho, el paciente albino deben ser consciente de las probabilidades de desarrollar cáncer de la piel a edad temprana.
Pero, si la condición es atendida a tiempo, “si al paciente se le da un cuidado esmerado y un seguimiento continuo con un especialista en cáncer de la piel”, su prognosis sería más favorable. Y, en caso de que llegara a padecer de cáncer cutáneo, “se podría atender temprano, el tratamiento sería más sencillo y la recuperación, más rápida”, aclaró el experto.
Áreas más susceptibles
-Nariz
-Orejas
-Cuero cabelludo
-Manos y pies
-Brazos y piernas
Precauciones adicionales:
-Limitar la exposición durante de 9:00 a.m. a 3:00 p.m.
-Usar bloqueador solar en todo momento
-Usar sombrilla
-Usar maquillaje con bloqueador solar integrado
-Usar gafas de sol con protección UV
-Usar gorras / sombreros
-Vestir con ropa de manga larga y pantalones largos
Alexander Lugo Janer es dermatólogo especialista en cirugía de cáncer de la piel con práctica en Hato Rey. Para más información, 787-274-2244.