Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC, en ingles) eliminaron hoy una controvertida guía sobre el coronavirus y dijeron que cualquier persona que haya estado en contacto cercano con otra infectada debe hacerse la prueba.

El instituto esencialmente volvió a su guía de pruebas anterior, deshaciéndose del lenguaje publicado el mes pasado que decía que las personas que no se sentían enfermas no necesitaban hacerse la prueba.

Ese cambio había desencadenado una serie de críticas de los expertos en salud, quienes no podían entender por qué la principal agencia de salud pública de Estados Unidos diría tal cosa en medio de una pandemia que ha sido difícil de controlar.

Relacionadas

Funcionarios de salud se mostraron evasivos sobre por qué habían hecho el cambio en agosto, y algunos especularon que fue impuesto a los CDC por personas designadas por políticos dentro de la administración Trump.

Los CDC ahora dicen que cualquier persona que haya estado a menos de seis pies de una persona con infección documentada durante al menos 15 minutos debe hacerse una prueba.

La agencia calificó los cambios como una “aclaración” que se necesitaba “debido a la importancia de la transmisión asintomática y presintomática”.