Montevideo.- Un estudio llevado a cabo por investigadores de Francia, Estados Unidos y Uruguay sobre las células inmunes que actúan en la inflamación crónica de la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA) brindará un aporte "novedoso" y "significativo" para tratar la enfermedad.

Así lo expresó a Efe el investigador del Instituto Pasteur de Montevideo y autor principal del artículo publicado este jueves por el "Journal of Clinical Investigation Insight", Emiliano Trias, quien subrayó que, si bien hay que seguir investigando, el hallazgo de los tipos celulares que actúan en la inflamación de pacientes con ELA es "novedoso", ya que no hay precedentes de otros estudios que lo evidencien.

Trias, que se trabaja en el Laboratorio de Neurodegeneración del instituto, explicó que si bien la ELA se caracteriza por una gran inflamación y tanto los mastocitos como los neutrófilos son dos tipos de células que tienen un rol central en ese proceso, no había estudios que se enfocaran en ello.

"No había nada en la literatura que nos dijera que estos tipos celulares jugaban un rol infiltrando la vía motora (...) y nos sorprendió que nunca antes se hubiera ido a buscar este tipo de célula tan importante en la inflamación crónica tratándose de una enfermedad donde la inflamación juega un papel central", apuntó el científico.

Trias destacó así que, fruto de un proceso que comenzó hace unos cinco años, la investigación demostró una "infiltración muy importante" de mastocitos y neutrófilos en las conexiones neuronales que permiten mover los músculos que confirmó la hipótesis del estudio.

A su vez, gracias a un aporte "clave" del doctor Peter King, que dirige una clínica conjunta de la Universidad de Alabama y del Centro Médico para Veteranos de Birmingham y dio acceso a tejidos donados por pacientes con ELA, los investigadores pudieron corroborar que lo que veían en los modelos animales también se daba en los humanos.

En ese sentido, el investigador señaló que, una vez identificado ese mecanismo de las células inmunes, se puede avanzar hacia un tratamiento que pueda inhibirlas y atacar la inflamación, algo que es clave en la lucha contra esa patología.

"Estas enfermedades neurodegenerativas, sobre todo la ELA, no tienen cura y ni siquiera contamos hoy en día con tratamientos que puedan detener el avance. Después que comienzan los síntomas es ineluctable y el paciente muere en un período de aproximadamente tres años", aseveró Trias.

"Por lo tanto encontrar formas que busquen enlentecer la progresión de forma significativa, sobre todo para intentar brindarle a los pacientes una mejor calidad de vida por el mayor tiempo posible, es fundamental", añadió.

Es así que el grupo de investigación, integrado por el Instituto Pasteur junto a la Universidad de Alabama en Birmingham (UAB) y el Instituto Imagine de París, se encuentra trabajando con un fármaco denominado "mastinib", utilizado para bloquear el efecto de mastocitos en tumores, para el caso de la ELA.

"El masitinib es un fármaco que hace relativamente poco terminó un estudio multicéntrico a nivel mundial donde participaron más de 400 pacientes. Nosotros no estamos involucrados en la parte clínica (...) pero estamos mostrando nuevos mecanismos de acción y nuevas células que pueden ser potenciales blancos para fármacos como este", evaluó.

Por otro lado, si bien sostuvo que no se puede decir aún cuánto tiempo un tratamiento con un fármaco así puede prolongar la vida de las personas con ELA, Trias remarcó que tampoco se está lejos de averiguarlo.

"Todavía no me atrevería a decir que estamos lejos de saberlo porque hoy en el mundo hay decenas de ensayos clínicos que se están llevando a cabo y decenas de fármacos que están siendo probados pero creo que tenemos que seguir haciendo mucho trabajo de investigación básica para acelerar los procesos y poder comprender cada vez más", concluyó.