Los colores te hablan de la nutrición del alimento
Hay quienes prefieren “esconderle” las frutas y vegetales a los niños en sopas, salsas o jugos, pero ¿les estamos haciendo un favor?

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 10 años.
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Es bastante conocido que a los nenes no les gusta lo nuevo, o que se vea “raro”. Los vegetales y frutas suelen caer en esa categoría y muchos menores prefieren irse a la cama sin comer antes de meterse a la boca un pedazo de zanahoria, por más que les juremos que sabe bien.
Hay quienes prefieren “esconderle” las frutas y vegetales a los niños en sopas, salsas o jugos, pero ¿les estamos haciendo un favor? ¿No sería mejor que aprendieran, desde pequeños, a alimentarse bien?
Para que tengas una idea de qué beneficios tienen algunos productos de la tierra, la publicación “Eat this, not that” ofrece la siguiente guía:
Rojo:
Los productos agrícolas de este color tienen como ingrediente estrella el licopeno, y el tomate es su rey. El licopeno protege de problemas causados por el sol, problemas del corazón y algunos tipos de cáncer. También ayudan a la respiración y pueden mejorar condiciones como el asma.
¿Qué escoger? Pimientos, tomates, melón de agua y guayaba son buenas alternativas y “kid friendly”. Cada uno puede prepararse de distintas formas, desde rostizarlos y asarlos, convertirlos en sopas o, en el caso de la guayaba, en jugos o postres. Ojo, cuidado con el azúcar.
Anaranjado:
El nutriente principal es el beta-caroteno, que una vez consumido se convierte en vitamina A y ayuda al sistema inmunológico. Además, para una “súper visión” no hay nada como consumir frutas y vegetales de color chinita.
¿Qué escoger? Las chinas, mandarinas, zanahorias, batatas y melón, entre otros. En el caso de las batatas, puedes hacerlas al estilo de las papas fritas si las cortas y horneas a 400 grados por 30 minutos.
Amarillo:
Aquí quien gana es el nutriente beta-criptoxantino, parecido al beta-caroteno pero con otras propiedades: disminuye la inflamación en las coyunturas y ayuda a los niños a saltar más alto y correr más rápido, además de apoyar el sistema respiratorio.
¿Qué escoger? Maíz, piña, guineo y calabaza, entre otros.
Verde:
Todo lo que tiene este color contiene luteína y ceaxantina, además de clorofila. En combo, estos nutrientes alimentan la visión y ayudan al crecimiento de células nuevas, además de matar las bacterias.
¿Qué escoger? Coles de bruselas, aguacate, espárrago, lechuga romana, espinaca, brócoli, guisantes… la lista es bien amplia.
Azul y violeta:
Los flaonoides son las estrellas en estas frutas y vegetales. Protegen el corazón como nadie, ayudan a la memoria e, incluso, se ha demostrado que regeneran las células cerebrales o pueden hasta hacer que nazcan nuevas. ¡Inteligencia a granel!
¿Qué escoger? Berenjena, todos los tipos de “berries”, uvas, rábanos, remolacha y ciruelas, entre otros.