Canberra, Australia. El gobierno del estado australiano de Nueva Gales del Sur anunció planes hoy, martes, para inyectar oxígeno mecánicamente a lagos y ríos después de que cientos de miles de peces han muerto en medio de una onda cálida.

Hasta un millón de peces muertos fueron hallados flotando la semana pasada en el río Darling en el oeste estatal, y el gobierno estatal anunció que otros 1,800 en estado de putrefacción habían sido encontrados en el lago Hume, en el sur.

Niall Blair, ministro regional del agua, dijo que se habían adquirido 16 aireadores de baterías y serán colocados en varias vías fluviales afectadas por la sequía después de que se los entreguen el miércoles.

“Son una solución de curita (banda adhesiva sanitaria); lo reconocemos”, dijo Blair a los reporteros.

“Nada impedirá que los peces mueran a menos que logremos que el flujo en los ríos y el nivel en nuestras represas regrese a lo normal. Estamos haciendo todo lo que podemos para intentar limitar los daños”, agregó.

Los expertos dicen que la pérdida de oxígeno en el agua se debe a la combinación de una onda cálida que recorre gran parte de Australia, la sequía y al desarrollo de las algas.

Blair rechazó algunas críticas de que los gobiernos estaban permitiendo que los sistemas de irrigación tomaran demasiada agua de la cuenca Murray-Darling, el principal sistema de ríos de Australia, que atraviesa cuatro estados y es donde se produce una tercera parte de los alimentos que se consumen en el país.

Daniel Connell, experto en agua por la Universidad Nacional Australiana, dijo que probablemente morirán muchos peces más mientras se pronostica que la onda cálida en el país continuará hasta el fin de semana.

“Es una crisis muy predecible”, afirmó Connell.

Indicó que el quitarle agua al sistema para irrigar probablemente contribuyó a la pobre calidad del agua en los ríos, así como a la sequía que afecta a la mayor parte de Nueva Gales del Sur.

“Al reducir masivamente la cantidad de agua en el sistema, generas agua mucho más caliente, generas condiciones que favorecen mucho más el auge de las algas”, agregó.