Estocolmo. El premio Nobel de Física Didier Queloz, uno de los descubridores del primer planeta fuera del Sistema Solar, está convencido de que el ser humano no está hecho para vivir fuera de la Tierra y por eso le molestan algunos argumentos del multimillonario cofundador de Tesla, Elon Musk.

Queloz y el también suizo Michel Mayor ganaron el Nobel por ser los primeros en detectar un planeta que orbita una estrella de tipo solar, llamada 51 Pegasi. Eso fue en 1995 y hoy se conocen varios miles.

Aunque el astrónomo ha ayudado a descubrir tantos planetas lejanos -de cuya existencia incluso se dudaba- considera “totalmente irracional” la idea de que “somos una especie que va a viajar entre las estrellas”. Según dice, se puede enviar a robots, a máquinas, pero “no se trata de nosotros”.

“No estamos hechos para salir de la Tierra. Desde el punto de visto biológico hemos evolucionado desde hace más de 3,000 millones de años para nacer en la Tierra y permanecer en ella”, asegura Queloz.

Por eso, se confiesa “un poquito enfadado” con el empresario Elon Musk, presidente ejecutivo y consejero delegado de la firma de vehículos eléctricos Tesla Motors y máximo responsable ejecutivo y tecnológico de la empresa aeroespacial SpaceX, uno de cuyos muchos planes es establecer en Marte una colonia humana permanente.

Musk tiene “un discurso un poco peligroso” cuando dice que podemos seguir comportándonos como hasta ahora en la Tierra, porque un día nos iremos al planeta rojo, asegura Queloz.

Queloz, que reconoce “admiración” por algunos aspectos del programa de Musk sobre Marte, considera “una muy buen idea” ir de visita a estudiarlo.

“Pero, otra cosa es decir que nos vamos a mudar allí, a un lugar de condiciones horrorosas si se comparan con la Tierra”.

Queloz empezó joven a mirar las estrellas y cree que hacerlo sirve “para muchas cosas”, pues hay preguntas fundamentales para la Humanidad a las que en el pasado se les dio una respuesta “de tipo mitológico o religioso que no aporta gran cosa” y porque está en “la curiosidad natural” del ser humano intentar entender las cosas.

El Nobel señala que ahora tenemos millares de planteas extraños, que plantean muchas preguntas sobre el origen de nuestro Sistema Solar, pero que lo importante no es el número de exoplanetas, sino la naturaleza de esos sistemas planetarios.

“Hemos aprendido que hay muchas estrellas que tiene planetas y que en su mayor parte son diferentes a los del Sistema Solar, lo que es una gran sorpresa”.