Londres. Una serie de grabados de ciervos realizados hace entre 4,000 y 5,000 años ha sido descubierta en el túmulo funerario Dunchraigaig Cairn, en el oeste de Escocia, lo que supone la primera vez que se encuentran grabados prehistóricos de animales en esa región, informó este lunes la agencia de Entorno histórico de Escocia (HES, en inglés).

Los grabados, que datan del Neolítico o temprana Edad de Bronce y fueron hallados casualmente por el fotógrafo de arqueología Hamish Fenton, muestran a dos ciervos rojos machos con gran cornamenta, considerados la mayor especie de ciervo en esa época.

En otro grabado aparecen más cuadrúpedos, dos de los cuales parecen ser ciervos jóvenes, señala HES en un comunicado.

La agencia escocesa subraya que se trata de los grabados de animales “más antiguos” jamás hallados en Escocia “y los primeros ejemplos claros de grabados de ciervos del Neolítico o la temprana Edad de Bronce en todo el Reino Unido”.

Fenton ha expresado su “sorpresa” por encontrar “inesperadamente” las obras, que descubrió cuando enfocó con su linterna parte del techo de la tumba, cuando paseaba por la zona arqueológica de Kilmartin Glen.

La HES apunta en su nota que los ciervos eran fuente importante de alimento en esa época, mientras que los cuernos se usaban como herramientas, entre otras cosas.

A pesar de esto, no se habían hallado antes representaciones de estos animales, siendo los grabados prehistóricos más comunes en Escocia los de anillos concéntricos, cuyo uso o propósito se desconoce.

La principal investigadora del llamado Proyecto de arte en piedra de HES, Tertia Barnett, constata en el comunicado que, “hasta ahora, se creía que no existían grabados prehistóricos de animales de esta época en Escocia, aunque son conocidos en otras partes de Europa”.

“Es muy emocionante que hayan sido descubiertos por primera vez en el histórico Kilmartin Glen”, declaró.

Según Barnett, el hallazgo también indica que “las comunidades locales grababan animales además de los anillos concéntricos, lo que va en la línea de lo que sabemos de otras sociedades neolíticas o de la Edad de Bronce, particularmente en Escandinavia e Iberia”.