Hoy en día todos usamos Internet. Sin embargo, cuando la conexión WiFi comienza a fallar en casa es inevitable entrar en desesperación, renegar y tratar de pelear con el operador del servicio de Internet.

Aunque muchas veces estos problemas se deben a algunos errores que tenemos con el uso de algunos dispositivos que ralentizan o empeoran el servicio. Computer Hoy nos plantea algunos de estos errores.

Todo parte desde aprender a diferenciar entre router y módem. Mientras que el último es la caja que lleva la conexión a Internet a nuestra propia casa, el primero aparato que se conecta el módem y que distribuye el WiFi.

No esconder el router. Lo primero es encontrar una buena ubicación del router, preferible en el lugar central de la casa, sin algún dispositivo eléctrico cercano y lejos de alguna pared. Debe estar en un lugar visible. Además, es mejor que no esté entre varias paredes que bloquean la señal.

La velocidad de Internet. La velocidad de Internet puede ser un problema. En algunos casos no es necesario contratar un servicio de fibra muy alto. Según Computer Hoy está comprobado que las personas solo aprovechan un mínimo porcentaje de su servicio. Velocidades superiores a los 300 MB solo son necesarias si vivan muchas personas. Lo recomendable son 100 MB.

Tu propio router. Los operadores suelen dar solo un router, que se debería devolver y no suelen ser los mejores del mercado. Lo más recomendable es contar con su propio router. Así, las velocidades podrían mejorar y también la seguridad.