John McFall es el primer hombre en la historia con una discapacidad que será entrenado para convertirse en astronauta.

McFall, de 41 años, es padre de tres hijos, esposo y velocista inglés. Fue a los 19 años que perdió una pierna en un accidente motora. Luego, en los Juegos Paralímpicos de Pekín en 2008 ganó la medalla de bronce en la carrera de 100 metros.

De 2014 a 2016, McFall fue médico de base en el sistema de salud público británico y trabajó en una variedad de especialidades médicas y quirúrgicas en el sureste de Gales. En el 2016, se convirtió en miembro del Colegio Real de Cirujanos y es especialista en traumatología y ortopedia.

Ahora, se unirá a la Agencia Espacial Europea (ESA, en inglés) donde trabajará con diseñadores e ingenieros. De ahí, se probará para, posiblemente, convertirse en la primera persona discapacidad en viajar al espacio.

“Con mi amplia formación científica y una amplia gama de experiencias, me sentí obligado a tratar de ayudar a la ESA a responder esta pregunta: ¿Podemos conseguir que alguien con una discapacidad física haga un trabajo significativo en el espacio?”, cuestionó.

Además de McFall, otras cinco personas se integrarán a la generación 2022 para el entrenamiento de astronautas.

El grupo incluye al español Pablo Álvarez Fernández, la francesa Sophie Adenot, la británica Rosemary Coogan, el belga Raphael Liegeois y el suizo Marco Sieber, quienes fueron escogidos entre más de 22,500 aspirantes.

Con el exdeportista británico, la ESA estudiará qué necesita ser adaptado y rediseñado para un astronauta con impedimentos.

Alcanzar la meta a viajar al espacio será en varios años, si acaso se logra.