Puerto Rico experimenta un incremento de la erosión costera provocado por la crisis climática que afecta a costas y construcciones sin permisos cerca del mar, un problema que se acrecienta con la llegada de la temporada de huracanes.

El ingeniero civil Doel Muñiz señaló este miércoles a Efe que la erosión costera es un problema latente que afecta a muchas partes de Puerto Rico, en concreto a estructuras de construcciones edificadas en las costas, muchas sin los permisos necesarios.

Muñiz recordó que más del 50 % de las viviendas en Puerto Rico están construidas sin el correspondiente permiso de edificación de un ingeniero civil o arquitecto, lo que da idea de la magnitud de un problema que se agrava con el cambio climático, cuando las marejadas invaden las costas y provocan daños en viviendas construidas en plena costa.

“En Puerto Rico hay muchas áreas con viviendas unifamiliares construidas de forma informal”, destacó Muñiz, director ejecutivo del evento Mega Viernes Civil 2021, organizado por el Instituto de Ingenieros Civiles de Puerto Rico, que se celebrará el próximo 16 de julio.

“Hay que aunar esfuerzos para reducir ese más de 50 % de edificaciones en las costas sin permiso”, dijo, tras destacar que ahora se ven gravemente afectadas por la erosión costera.

La erosión ya ha alcanzado en algunos puntos el nivel severo, lo significa pérdida de costa de entre dos y cuatro metros al año, si bien esa situación vuelve a la situación anterior -no siempre- durante la temporada de marejadas de noviembre a marzo.

La erosión costera en muchas ocasiones es provocada por tormentas y huracanes, pero agravada por la construcción de infraestructura cerca del mar y una mala planificación.

Retirada de dunas

Incluso, las autoridades han sido responsables de favorecer esa erosión costera con decisiones como cuando en la década de los sesenta del pasado siglo se retiraron dunas de arena en Piñones, en Loíza, para rellenar humedales del Aeropuerto Internacional Luis Muñoz Marín.

Esa decisión provocó eliminar muros de contención naturales y dejar indefensas esas áreas ante tormentas, que así erosionaban de forma más fácil las costas.

Otras veces ha sido la naturaleza, en especial el huracán María de 2017, que causó que en el municipio de Humacao se perdieran cerca de 30 metros de playa, una situación que se repitió en muchas otras partes de la costa.

El geomorfólogo José Emanuelli, uno de los mayores especialistas de la isla en erosión, dijo a Efe que, sin duda, este es un problema que afecta a gran parte del litoral.

Detalló que uno de los problemas está provocado por la menor llegada de arena a las playas, lo cual ocurre, en el caso concreto de la isla, por la construcción de represas que la retienen.

Degradación de corales

Otro de los motivos que favorecen la erosión es la degradación de los corales en las costas, que si desaparecen dejan de funcionar como defensa contra la fuerza de las olas, que poco a poco van erosionado la costa.

Emanuelli subrayó que todo lo anteriormente destacado se ve empeorado por la construcción en las playas de la isla durante décadas de edificaciones pegadas al mar que ahora sufren la fuerza de las mareas, una situación que en algún momento habrá de tratarse.

“Planificar la retirada de esas estructuras es uno los asuntos que tendrá que abordarse”, subrayó.

El presidente del Instituto de Ingenieros Civiles de Puerto Rico, José Luis Flores, dijo a Efe que la erosión costera es un problema en la isla que enlaza con el cambio climático y las construcciones informales junto a la línea costera.

“El calentamiento global provoca una invasión de la costa en Puerto Rico”, detalló el ingeniero.