La Administración Nacional de la Atmósfera y los Océanos (NOAA) de Estados Unidos aumentó este jueves su pronóstico para la temporada ciclónica en la cuenca atlántica, que comenzó en junio y que ya ha producido cinco tormentas y un huracán.

“Los meteorólogos creen que las condiciones atmosféricas y oceánicas actuales, como las temperaturas récord de la superficie del mar Atlántico, probablemente contrarresten las condiciones atmosféricas generalmente limitantes asociadas con el evento de El Niño en curso”, explicó la NOAA en su boletín sobre la Perspectiva de la Temporada de Huracanes dado a conocer hoy.

“Los meteorólogos de la NOAA han aumentado la probabilidad de una temporada de huracanes en el Atlántico por encima de lo normal al 60 % (aumentada desde la perspectiva emitida en mayo, que pronosticó una probabilidad del 30 %). La probabilidad de una actividad casi normal ha disminuido al 25 %, por debajo del 40 % de probabilidad descrito en las perspectivas de mayo. Esta nueva actualización le da al Atlántico un 15% de posibilidades de ver una temporada por debajo de lo normal”, añaden.

Ahora se espera el desarrollo de entre 14 y 21 tormentas tropicales, 6 a 11 huracanes y de dos a cinco huracanes intensos (categoría 3 o más)

La NOAA, pronosticó en mayo que se formarían entre 12 y 17 tormentas tropicales, de las cuales de cinco a nueve pudieran ser huracán. De estos, entre uno y cuatro pudieran superar la categoría tres.

Una temporada de huracanes promedio produce 14 tormentas con nombre, de las cuales siete se convierten en huracanes, incluidos tres huracanes mayores.

La temporada ciclónica de 2022 se saldó con catorce tormentas con nombre, de las cuales ocho llegaron a huracanes, dos de ellos mayores (Fiona e Ian).