Si estás feliz y tienes cuenta de Twitter, tuitéalo. Es probable que otra gente también se ponga feliz y lo pase para adelante.

Según un análisis de 3,800 usuarios de Twitter escogidos al azar, las emociones se extienden de manera viral en esta red social, sobre todo si es una emoción positiva.

“Lo que usted tuitea y comparte en redes sociales importa. A menudo no solamente se está expresando, sino influyendo en otros”, señaló Emilio Ferrara, autor principal del estudio, según reseñado en el portal Science Daily.

Ferrara y Zeyao Yang, de la Universidad de Indiana, usaron un algoritmo que mide el valor emocional de los tuits, clasificándolos como positivo, negativo o neutro. Para conocer el alcance, compararon el sentimiento o la emoción del tuit con las emociones manifestadas en todos los tuits que aparecían en la alimentación (“feed”) de ese usuario durante una hora. Un número mayor que el promedio en tuits positivos en el “feed” fueron asociados con la producción de tuits positivos; y un número mayor al promedio en tuits negativos estaban asociados a otros tuits negativos.

Aproximadamente el 20 por ciento de los usuarios de Twitter fue considerado altamente susceptible a lo que los investigadores describieron como “contagio emocional”. Este grupo, según el análisis, era cuatro veces más propenso a dejarse influir por los tuits positivos.

Independientemente a la susceptibilidad de afectarse por los tuits, en general los mensajes positivos tenían más posibilidades de “contagiar” a todos los usuarios.

El estudio está basado en décadas de investigación que demuestran que las emociones pueden transmitirse a través del contacto persona a persona, a lo que ahora se suma que también se propagan a través de interacciones en línea.