En medio de la pandemia del coronavirus, los puertorriqueños gastan $500 mensuales en sus compras de alimentos y artículos relacionados, mientras son los “esposos” los que se han hecho cargo de las frecuentes visitas a las tiendas, según estableció la Radiografía del Consumidor presentada este jueves por la Cámara de Mercadeo Industria y Distribución de Alimentos (MIDA).

Aunque no se estableció una correlación con el hecho de que ahora son los hombres los que más visitan los supermercados, las tiendas de conveniencias y las farmacias, la encuesta también registró un aumento considerable en la venta de bebidas alcohólicas. Entre las bebidas que se destacan, en primer lugar, se encuentra el cognan o brandy, le sigue el whisky y luego las cervezas.

Otro aspecto importante que se reveló en la Radiografía del Consumidor es que las ventas en el mes de septiembre han comenzado a descender, luego de haber alcanzado un pico en los meses de marzo, abril y mayo. Este periodo corresponde al periodo de mayores restricciones que impuso el gobierno para evitar los contagios con coronavirus.

Esta presentación de la Radiografía del Consumidor es la primera que tiene programada MIDA en este mes de octubre. Tocó el tema de los ingresos y gastos que realizan los consumidores en tiendas relacionadas al mercado de alimentos.

Un representante de MIDA, Freddie Hernández, explicó durante una presentación virtual que este análisis de mercado se realiza todos los años, porque “nos ayuda a definir estrategia hacia el futuro”.

Informó que el próximo jueves presentarán la frecuencia de las visitas a estas tiendas y el 29 de octubre cómo está el mercado de las ventas a través del internet.

Para este estudio de los ingresos y gastos de los consumidores se destacó el hecho de que se registra un incremento de un 18% del gasto promedio de los consumidores en su compra.

Según precisó Isamarie Sandoval, representante de las tiendas Walmart, este incremento fue mayor al 13% registrado tras el paso del huracán María.

Específicamente, los consumidores están desembolsando mensualmente $500 en compra de alimentos, productos relacionados a la higiene y el hogar, así como en comida preparada.

Para que tenga una idea, en el 2019 los consumidores tenían un promedio de gasto de $422 y en el 2018 de $445.

“La pandemia está provocando un gasto mayor a los consumidores”, señaló Sandoval.

Precisó que, en los supermercados y otras tiendas vinculadas a la venta de alimentos no preparados, los clientes tienen un gasto promedio de $434. Esta suma se divide en $340.23 para alimentos sin procesar.

El estudio revela que el gasto mayor de los boricuas es en carnes. Luego gastan más en frutas y verduras. La inversión menor es en arroz y granos.

Los otros $94.32 que completan la ecuación de lo gastado en las tiendas, se dividen en productos que no son alimentos. En orden descendente, las compras se centran en detergente de ropa, artículos de limpieza del hogar y productos de papel, indica la Radiografía del Consumidor preparada por el empresa Nielsen.

Este dinero es invertido, principalmente, en los supermercados. Este año la frecuencia de visita fue de 7.8%, mientras en el 2019 fue de 5.8%.

Las ventas online en los supermercados también crecieron. De un 0.2 que se registró en el 2019, alcanzó en medio de esta pandemia un 3.25%.

Por otro lado, el estudio encomendando por MIDA señala que los “esposos” habían asumido con un 33% la responsabilidad de acudir a hacer las compras. Las esposas, que siempre se habían mantenido en la delantera, bajaron a un 31%, según destacó Herbert Torres, representante de Supermercados Econo.

Lo más que destaca de esta evaluación, sin embargo, es que personas más jóvenes habían asumido la responsabilidad en un 51% de hacerle la compra a sus padres y a sus suegros para evitar que se contagiasen con coronavirus.

En cuanto a los ingresos, se destacó que el 46% de la población hace sus compras con el dinero que les llega del Programa de Asistencia Nutricional (PAN).

Asimismo, se destacó que el 56% de las 1,360 personas entrevistas para la encuesta dijo que trabaja en la empresa privada, el gobierno o por cuenta propia.

Otro dato que se destacó fue que en septiembre las ventas comenzaron a bajar. Se atribuyó a que en agosto se terminó un aumento temporero que se le concedió a los participantes del PAN para ayudarles en este periodo de pandemia, así como que ya los consumidores han comenzado a salir a sus trabajos y a comprar alimentos en restaurantes.

Cabe destacar que Torres y Sandoval estipularon que aún así los supermercados y otras tiendas que venden comestibles deben aprovechar que los boricuas ahora invierten más en la compra de productos para los desayunos y en las mariendas.

También destacaron que se debe considerar una reducción de porciones para las ventas especiales que se realizan con motivo de Acción de Gracias y Navidad. Esto se debe a que las reuniones familiares se han limitado para evitar los contagios.

“Es importante tener inventario para el consumidor”, destacó Torres, como el aspecto más importante para mantener al público cautivo.