Tuvimos que ir bien lejos, pero valió la pena. Para probar la nueva Porsche Cayenne del 2008 viajamos hasta Chiclana de la Frontera, en Cádiz, España. Allá nos unimos a un grupo de periodistas automotrices de lugares tan diversos como Asia, Australia, Europa y Latinoamérica.

A nuestra disposición estaba una gran flota de Cayennes en todos sus modelos: la Cayenne con su motor V6 de 3.6 litros y 290 caballos de fuerza; la Cayenne S con un intimidante V8 de 4.8 litros y caballaje de 385 y la siniestra Cayenne Turbo con su V8 turbo de 4.8 litros, cuya potencia es de unos 500 furiosos caballos de fuerza y un demoledor torque de 516 libras.

La ruta, de poco más de 180 millas, nos llevó por amplios expresos y estrechas carreteras rurales. Por tanto, pudimos probar las distintas versiones este nuevo modelo de  segunda generación tanto en rectas como en curvas. En la comodidad de los expresos pudimos experimentar el agresivo arranque de 0 a 60 de tan sólo 4.9 fugaces segundos de la Cayenne Turbo. Pero muy desafortunadamente, no pudimos probar su velocidad máxima de 171 mph.

Lo que sí pusimos a prueba fue el nuevo sistema Porsche Dynamic Chasis Control (PDCC), el cual nos dio una increíble estabilidad en las carreteras de curvas aún a altas velocidades. El control que el trío de guaguas mostró sobre las curvas fue absoluto.

Probamos las guaguas aún fuera de las carreteras españolas. En una gran finca en la que crían toros de corrida cerca del pueblo de Medina Sidonia, nos fuimos por un corto, pero muy entretenido recorrido off road.

En total, la ruta nos llevó por un poco más de 180 millas de escénicas carreteras de esta hermosa región sureña de la península Ibérica. Por allá, a bordo de la Cayenne vimos unos paisajes espectaculares, algunos de los cuales pueden ver en estas páginas.

aoneill@primerahora.com