Las ventas de autos eléctricos de Tesla cayeron drásticamente en los últimos tres meses mientras las opiniones políticas de Elon Musk continúan alejando a los compradores, un desarrollo significativo dado que se esperaba que el enojo con el multimillonario ya hubiera disminuido.

La compañía reportó una caída del 13% en las ventas el miércoles, una señal de que la afinidad de Musk con el presidente Donald Trump, y políticos de extrema derecha en Europa ha tenido un impacto profundo y duradero en el atractivo de la marca Tesla. Las nuevas cifras muestran que los fabricantes rivales de vehículos eléctricos no han perdido tiempo en aprovechar la debilidad de la compañía para robar cuota de mercado y sugieren que el informe de ganancias trimestrales de Tesla más adelante este mes también podría decepcionar.

Las ventas cayeron a 384,122 de abril a junio, por debajo de las 443,956 en el mismo período del año pasado. Durante este período, Musk dejó formalmente la administración de Trump como zar de reducción de costos y aumentaron las esperanzas de que las ventas se recuperaran. Musk mismo dijo recientemente que Tesla estaba en medio de un “gran repunte” en las ventas.

Aun así, algunas partes del informe fueron alentadoras. Las ventas de los Modelos 3 y Y totalizaron 373,728, por encima de la estimación de 356,000 de los analistas de Wall Street. Las acciones de Tesla subieron un 3.7 % en las operaciones matutinas.

“Los números no fueron tan malos como se pensaba con todos los recortes de pronósticos de analistas que vimos la semana pasada”, señaló Seth Goldstein de Morningstar, aunque agregó que el informe en general mostró que la compañía enfrenta grandes desafíos. “La línea de productos actual está en saturación de mercado y Tesla necesitará el nuevo vehículo asequible para aumentar las entregas”.

Musk ha prometido que un modelo de vehículo eléctrico más barato llegará este año y que impulsará las ventas.

Aún no está claro si la última disputa de Musk con Trump ayudará a atraer de nuevo a los compradores que han estado enojados por las posiciones políticas del multimillonario. Después de que Musk una vez más recurriera a las redes sociales para criticar el proyecto de ley presupuestario de Trump, el presidente amenazó el martes con usar el poder de su oficina para perjudicar sus empresas, incluida Tesla, haciendo que sus acciones cayeran más del 5%.

Las nuevas cifras llegan mientras Tesla se enfoca menos en nuevos modelos y más en robots, tecnología de conducción autónoma y robotaxis transportando pasajeros sin nadie al volante.

Tesla está en medio de una prueba de robotaxis en Austin, Texas, que parece haber transcurrido sin problemas en su mayor parte. Pero también ha atraído la atención de los reguladores federales de seguridad automotriz debido a algunos percances, incluido un caso en el que se mostró un taxi Tesla en un video circulando por un carril contrario.

La competencia de los fabricantes rivales de vehículos eléctricos es especialmente feroz en Europa, donde la china BYD ha mordido su cuota de mercado. Las ventas de Tesla cayeron un 28% en mayo en 30 países europeos, incluso cuando el mercado general de vehículos eléctricos se expandió drásticamente, según la Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles.

Musk ha reconocido que su trabajo como jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental y su afinidad con candidatos de extrema derecha en Europa han perjudicado a la compañía. Pero atribuyó gran parte de la caída en las ventas a los clientes que esperaban nuevas versiones del Modelo Y, el más vendido de Tesla.

Tesla reportará los resultados financieros del segundo trimestre el 23 de julio. En el primer trimestre, el ingreso neto cayó un 71%.