Chicago. El concejal demócrata Gilberto Villegas, del Distrito 36, quiere que Chicago haga desaparecer el nombre del presidente Donald Trump de una torre de 98 pisos ubicada en el centro de la ciudad a las orillas del río Chicago.

El Trump International Hotel & Tower fue inaugurado en 2009 y bautizado cinco años después con la marca TRUMP en letras de seis metros que no gustaron a la Alcaldía por lo exageradas, y desde entonces han sido motivo de polémica.

Villegas declaró este miércoles que el letrero “no representa los valores de Chicago” y anunció a la alcaldesa Lori Lightfoot la próxima presentación de una ordenanza que prohibirá que cualquier persona con antecedentes de traición, sedición o acciones subversivas tenga vínculos con la ciudad.

Según el concejal, el juicio político que se puso en marcha hoy en la Cámara de Representantes en Washington permitiría aplicar de inmediato la resolución al magnate cuando deje la Casa Blanca el 20 de enero.

No es la primera vez que el polémico letrero es cuestionado por el Concejo Municipal, que en 2017 declaró a Trump “persona non grata” por su mala relación con la tercera ciudad más populosa de Estados Unidos, con 2.7 millones de habitantes.

Desde la campaña electoral de 2016, el entonces candidato republicano comenzó con sus duras críticas por los altos índices de criminalidad en la ciudad y, ya convertido en presidente, llegó a amenazar con enviar a los “federales” o a la Guardia Nacional para patrullar las calles de Chicago.

La Torre Trump, que alberga a 486 condominios y 339 habitaciones de hotel, no alcanzó los rendimientos esperados durante la presidencia del magnate, informó recientemente el diario The Washington Post.

El precio de los apartamentos cayó de 2.3 millones de dólares en 2009 a menos de la mitad, y los ingresos del hotel bajaron de 72.3 millones en 2015 a 50.3 millones en 2018, según información obtenida por el diario.