Cinco policías y una civil resultaron heridos este viernes en un tiroteo en Phoenix (Arizona) cuando los agentes respondieron a una denuncia sobre disparos de armas de fuego, informaron las autoridades.

El jefe de la Policía, Jeri Williams, dijo que cuando uno de los agentes se aproximó a una residencia, en el sur de la ciudad, alguien disparó desde adentro causándole heridas.

Poco después alguien colocó afuera de la casa un coche con un bebé, y cuando otros agentes se aproximaron para tomar a la criatura, la misma persona volvió disparar hiriendo a cuatro policías.

La policía detalló que una mujer también resultó herida y se encontraba en condición crítica en el hospital.

Williams dijo que cuatro de los policías se recuperaban de sus heridas en el hospital, y uno más que sufrió heridas graves también se recuperaba.

El jefe policial indicó que el sospechoso permanecía dentro de la casa y advirtió a la población de que se mantenga alejada del sitio.