Washington. El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, afirmó este viernes que su Gobierno está revisando la venta de armamento a Arabia Saudí, tras la publicación de un informe de Inteligencia que confirma que el príncipe heredero del reino, Mohamed bin Salmán, aprobó el asesinato del periodista Jamal Khashoggi.

“Respecto a las ventas de armas, usted está en lo cierto, hay una revisión en marcha”, dijo el titular de Exteriores en una rueda de prensa en el Departamento de Estado, en respuesta a una pregunta sobre la postura de Washington acerca de la comercialización de armamento a Riad tras la difusión del informe.

Blinken agregó que hay una “distinción muy importante” entre el compromiso de EE.UU. de no involucrarse o apoyar actividades ofensivas y operaciones en el Yemen, incluyendo el suministro de armas, y “las necesidades legítimas del reino de Arabia Saudí, en términos de su propia defensa”.

El príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salmán (en la foto), habría autorizado la muerte de Jamal Khashoggi, periodista crítico de la familia real, en la embajada saudí en Istambul.
El príncipe heredero de Arabia Saudita, Mohamed bin Salmán (en la foto), habría autorizado la muerte de Jamal Khashoggi, periodista crítico de la familia real, en la embajada saudí en Istambul. (ANDY RAIN / POOL)

Por lo que “estamos revisando estas ventas de armas y nos estamos asegurando de que lo que proporcionamos se dirige a la defensa del reino y no a su capacidad para continuar las operaciones ofensivas”, destacó.

Blinken hizo estas declaraciones después de que la Oficina de la Directora del Departamento de Inteligencia Nacional de EE.UU. desclasificara un informe que apunta que Bin Salmán aprobó el asesinato de Khashoggi, un periodista saudí crítico con la familia real, el 2 de octubre de 2018 en el consulado de su país en Estambul.

Pese a haber anunciado poco después restricciones de visados a 76 individuos saudíes y de que el Tesoro de EE.UU. impusiera sanciones a un responsable del reino y a la guardia personal del príncipe, Blinken aclaró en la rueda de prensa que “la relación con Arabia Saudí es mayor que un solo individuo”.

“Estamos haciendo lo que el presidente (Joe Biden) dijo que debíamos hacer, que es revisar nuestra relación en su totalidad, y asegurarnos de que sigue de una manera que refleja mejor nuestros intereses y valores”, apuntó el titular de Exteriores.

A ese respecto, matizó que las acciones adoptadas este viernes por EE.UU. no suponen una ruptura de los lazos con el reino, sino un reajuste para que estas relaciones estén más alineadas con Washington.

A principios de febrero, Biden anunció que suspendía el apoyo de EE.UU. a la coalición árabe liderada por Arabia Saudí, que desde hace cinco años participa en la cruenta guerra de Yemen.

Esa retirada del apoyo ya supuso que Washington suspendiera unos acuerdos de venta de armas con Riad y Emiratos Árabes Unidos que había iniciado el predecesor de Biden en la Casa Blanca, Donald Trump.