OKLAHOMA CITY. Más de 450 confinados salieron ayer, lunes, por las puertas de las cárceles de Oklahoma como parte de lo que los funcionarios estatales dicen que es la conmutación de penas de cárcel más grande ocurrida en un solo día en la historia de los Estados Unidos.

La liberación de los reclusos, todos con condenas por delitos de drogas y propiedad de bajo nivel, fue el resultado de un proyecto de ley firmado por el nuevo gobernador republicano Kevin Stitt. El estatuto aplicó retroactivamente sentencias de delitos menores por posesión simple de drogas y delitos de propiedad de bajo nivel, esto conforme a una votación de 2016.

Stitt ha hecho de la reducción de la tasa de encarcelamiento más alta de la nación de Oklahoma una de sus principales prioridades y ha designado miembros con mentalidad reformista para la Junta de Indultos y Libertad Condicional del estado.

Liberar a los reclusos le ahorrará a Oklahoma un estimado de $11.9 millones sobre el costo de continuar manteniéndolos tras las rejas, según la oficina del gobernador.

La junta la semana pasada consideró 814 casos y recomendó 527 reclusos para la conmutación. Sin embargo, 65 están detenidos por otras situaciones, dejando a unos 462 reclusos en libertad el lunes.

"Se siente increíble estar del otro lado de la cerca", dijo Tess Harjo, una joven de 28 años que fue liberada el lunes del Centro Correccional Eddie Warrior en Taft, Oklahoma.

Harjo fue sentenciada a 15 años de prisión después de su condena en el condado de Okmulgee el año pasado por posesión de metanfetaminas. Ella dijo que estaba sorprendida por la cantidad de mujeres que conoció en prisión que cumplían largas condenas por delitos de drogas.

"He conocido a muchas mujeres aquí que vinieron de una prisión de seguridad media o máxima que ya han cumplido 18 años o más", dijo Harjo. "Es ridículo.".

Steve Bickley, el nuevo director ejecutivo de la Junta de Indultos y Libertad Condicional, dijo que la liberación del lunes es la mayor en un solo día, superando la conmutación en 2017 del presidente Barack Obama de las condenas por drogas de 330 prisioneros federales en su último día en el cargo.