Tres mujeres rescatadas de una casa tras una década de haber desaparecido dijeron ayer que se sienten contentas de estar libres y pidieron privacidad para poder restablecer vínculos con sus familiares.

Un abogado de las mujeres indicó, además, que se sienten extremadamente agradecidas ante el respaldo de sus familiares, organismos policiales y la comunidad.

Amanda Berry, Gina de Jesús y Michelle Knight, de 20 a 30 años de edad, siguen a solas, lejos del ojo público, y difundieron su primera declaración desde que fueron encontradas el 6 de mayo luego que Berry escapó y llamó a la Policía.

Ariel Castro, de 52 años, es acusado de haberlas encarcelado por cerca de una década en su vivienda. Pruebas de ADN confirmaron que el puertorriqueño Castro es el padre de una niña de seis años que Berry dio a luz en la casa. La niña escapó con Berry.

El abogado leyó una declaración atribuida a las víctimas.

Knight, la primera en desaparecer y la última de las tres dada de alta del hospital, dijo que “agradezco a todos por el respaldo y los buenos deseos. Estoy sana, dichosa y segura, y me acercaré a mi familia, amigos y simpatizantes cuando sea el momento oportuno”.

Berry agregó que “les agradezco por todo lo que hacen y siguen haciendo” .

Y De Jesús manifestó que “estoy tan contenta de estar en casa y deseo agradecerles por todas sus plegarias. Solo quiero ahora tiempo para estar con mi familia”.