Los republicanos en el Senado de Estados Unidos bloquearon este miércoles la aprobación de un proyecto presupuestario de unos 105,000 millones de dólares que incluía partidas para apoyar a Israel y Ucrania.

A cambio de sus votos, la bancada conservadora exige restringir las leyes de migración de Estados Unidos, en particular el sistema de asilo, y eliminar una serie de permisos humanitarios para migrantes.

Más temprano, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, urgió al Congreso a aprobar estos fondos para Ucrania, alertando de que si el líder ruso, Vladímir Putin, gana la guerra, “no parará”.

“No podemos dejar que Putin gane”, apuntó el mandatario.

El Congreso lleva meses discutiendo la idoneidad de aprobar más ayuda militar para Ucrania. No obstante, muchos republicanos cuestionan que Estados Unidos deba seguir financiando una guerra a la que ya ha destinado más de 75,000 millones.

Previamente, el presidente de la Cámara de Representantes, el republicano Mike Johnson, envió una misiva a la Casa Blanca en la que avisaba que sin promover reformas profundas para regular la inmigración, su grupo no va a apoyar los fondos para Ucrania.

“Estoy dispuesto a hacer concesiones importantes en la frontera. Necesitamos arreglar el sistema fronterizo. No funciona. Y hasta el momento no he obtenido respuesta”, indicó por su parte Biden en una comparecencia ante la prensa en la Casa Blanca.

Pese a la disponibilidad de Biden, los republicanos no aprobaron el paquete.