Washington. El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, se negó este miércoles a confirmar si ha estado en contacto con el presidente salvadoreño, Nayib Bukele, para solicitar el retorno de Kilmar Ábrego García, un migrante deportado al país centroamericano a pesar de que un juez había prohibido su expulsión.

Durante una reunión del gabinete del presidente Donald Trump, Rubio fue interrogado por la prensa sobre las informaciones que apuntan a que habría mantenido comunicaciones con Bukele en relación con el caso.

“Jamás te diría eso. ¿Y sabes a quién más jamás se lo diría? A un juez. Porque la conducción de nuestra política exterior corresponde únicamente al presidente”, respondió Rubio.

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Acto seguido, Trump intervino para señalar que Bukele es “un gran amigo” de Estados Unidos y aseguró que no ha conversado con él sobre este asunto.

Según confirmaron varias fuentes a la cadena CNN, Rubio habría mantenido contactos directos con el mandatario salvadoreño para abordar la situación de Ábrego García, cuyo caso llegó hasta el Tribunal Supremo, que ordenó al Gobierno estadounidense facilitar su retorno.

Ábrego García, de nacionalidad salvadoreña, fue arrestado en Estados Unidos y trasladado a la prisión de máxima seguridad conocida como el Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot), en El Salvador, acusado de pertenecer a la Mara Salvatrucha (MS-13).

El caso generó una gran polémica, ya que Ábrego García, quien defiende su inocencia, contaba con una orden judicial que impedía su deportación. Las autoridades migratorias admitieron posteriormente que su expulsión fue “un error”.

El hombre fue trasladado recientemente del Cecot a otro centro penitenciario en El Salvador.

Durante una reunión celebrada hace dos semanas en la Casa Blanca, Bukele dejó claro que no tiene intención de liberar a Ábrego García, a quien considera un “terrorista”.

Por su parte, Trump declaró el martes en una entrevista con ABC News que podría lograr la liberación de Ábrego García, aunque aseguró que no tiene intención de hacerlo.

Estas declaraciones contradicen la versión oficial del propio Gobierno estadounidense, que sostiene que el regreso de Ábrego García no está en sus manos, ya que se encuentra bajo custodia de otro país.