Casi tres meses después de que el 12 de junio pasado se produjese el tiroteo en una discoteca de Orlando (Florida) en el que murieron 49 personas, el último herido de la peor matanza por arma de fuego en Estados Unidos salió del hospital, informó hoy el centro médico.

El grupo Orlando Health, que administra el Centro Médico Regional de Orlando, al que fueron llevados 44 de los 53 heridos del tiroteo, indicó a través de su cuenta oficial en Twitter que el paciente fue dado de alta.

Al igual que ha sucedido con anterioridad, la organización no facilitó más detalles sobre la condición médica ni heridas que sufrió el paciente.

Orlando Health indicó que desde que comenzaron a llegar heridos desde el club de ambiente gay Pulse en la madrugada del 12 de junio sus doctores realizaron 76 intervenciones quirúrgicas.

Al Centro Médico Regional de Orlando, situado a escasas cuadras del local nocturno, llegaron 44 pacientes, de los cuales 9 murieron poco después de llegar.

Con el alta del último herido, los 35 pacientes que atendieron en este hospital lograron superar el trance, a pesar de que el propio personal médico temía en los primeros días de que la lista de fallecidos pudiera aumentar debido a la gravedad de las heridas.

Cirujanos de este centro médico explicaron tras el sucesos que lo vivido aquella noche en el hospital se parecía a una "escena de guerra", debido a las "grandes heridas" que presentaban los pacientes, producidas por impactos de bala de un arma de "gran calibre".

Cincuenta personas, incluido el autor de la matanza, el estadounidense de origen afgano Omar Mateen, de 29 años, quien estaba armado con un fusil de asalto y una pistola, murieron.