Autoridades en Arkansas, Oklahoma y Texas se preparaban el sábado para una tormenta invernal que, de acuerdo con los meteorólogos, causará fuertes nevadas y hielo en la región a partir del sábado por la noche y la mañana del domingo.

“Todo Texas enfrenta una tormenta invernal extremadamente peligrosa”, dijo el gobernador de Texas, Greg Abbott, al instar a la población a permanecer en casa y alejados de las autopistas del estado que, dijo, muy probablemente serán cubiertas de nieve o hielo y serán intransitables.

Abbott, que el viernes emitió una declaratoria de desastre para todos los 254 condados de Texas, agregó que ha solicitado a las autoridades federales que hagan una declaratoria previa a la inminente tormenta.

Se esperan temperaturas inferiores del nivel de congelamiento en todo Texas, de acuerdo con el Servicio Meteorológico Nacional, mientras que en el área de Dallas se pronostica una tormenta que arrojará hasta ocho pulgadas de nieve. Cerca de dos pulgadas de nieve podían caer en el área de Houston, algo inusual en la ciudad del sureste de Texas en que la temperatura promedio durante los días de febrero suele rondar los 60 grados Fahrenheit.

Abbott, el gobernador de Oklahoma Kevin Stitt y su homólogo de Arkansas, Asa Hutchinson, han asignado por separado unidades a elementos de la Guardia Nacional para brindar ayuda a las agencias estatales en labores como el rescate de conductores varados en medio de las tormentas.

Stitt también ha declarado un estado de emergencia para cada uno de los 77 condados de Oklahoma antes de una tormenta que según pronóstico del Servicio Meteorológico causaría una nevada que alcanzaría 10 pulgadas en el centro y noreste del estado.