Washington. El presidente Donald Trump se reunió el jueves con la familia de una soldado que según investigadores fue asesinada en la base del Ejército donde estaba asignada en Texas, una historia que consideró “terrible” y se ofreció a aportar dinero para los gastos del funeral.

La familia de la especialista Vanessa Guillen, cuyos restos fueron encontrados el 2 de julio después de que desapareció de Fort Hood en abril, se reunieron con docenas de simpatizantes antes de entrevistarse con Trump y pidieron justicia y cambios en la forma en que las fuerzas armadas abordan los casos de abuso y acoso sexual.

“Es una historia increíble. Es una historia terrible”, le dijo el mandatario a la familia en la Oficina Oval. “Así que vamos a investigar con gran fuerza. Ya hemos empezado, como ustedes saben, y llegaremos al fondo del asunto. Quizá puedan salir cosas que ayuden a otras personas en una situación como Vanessa. Estaremos en comunicación constante con ustedes”.

La familia de Guillen ha dicho que ella era acosada sexualmente por el soldado sospechoso de asesinarla, pero el Ejército afirma que no hay pruebas que sustenten esa afirmación. El Ejército ha dicho que tal vez Guillen padeció acoso de otras personas en la base, pero no de índole sexual. El secretario del Ejército, Ryan D.McCarthy, ordenó el 10 de julio investigar el ambiente de mando en Fort Hood.

“La verdad saldrá a la luz les guste o no”, dijo Lupe Guillen, hermana menor de Vanessa Guillen, antes de la reunión con el presidente.

Lupe Guillen señaló que los familiares estaban desilusionados de no escuchar nada del gobernador de Texas, Greg Abbot, sobre el caso de su hermana y estaban listos a llevar su historia directamente a la Casa Blanca.

John Wittman, un portavoz de Abbott, dijo que la familia Guillen no ha contactado a la oficina del gobernador pero él está dispuesto a ayudar. Señaló que la oficina del gobernador examina si Texas tiene alguna autoridad sobre la muerte de un elemento de las fuerzas armadas. También señaló que la fiscalía general estatal está viendo si la familia podría tener derecho a recibir asistencia del fondo de compensación para víctimas de crímenes.

“El gobernador Abbot está dolido del corazón por la familia Guillen y él y la primera dama los tienen en sus oraciones”, dijo Wittman en un mensaje de texto.

Los investigadores no han revelado un móvil para la muerte de Guillen. Dijeron en una denuncia que la víctima fue asesinada a golpes con un garrote en el depósito de armas de la base del Ejército cerca de la ciudad de Killeen. El soldado especialista Aaron Robinson, de 20 años, de Fort Hood, es sospechoso de haber asesinado y descuartizado a su colega.

Robinson se suicidó tras ser confrontado por la policía el 1 de julio. Una civil sospechosa, Cecily Aguilar, de 22 años, está detenida por tres cargos de asociación delictuosa para destruir pruebas por ayudar a Robinson a ocultar los restos de Guillen e intentar huir.