El presidente estadounidense Donald Trump pidió el domingo avances en las conversaciones de alto el fuego en la guerra en Gaza, solicitando un pacto que detenga los combates en el conflicto después de 20 meses, al tiempo que Israel y Hamás parecían acercarse a un acuerdo.

Ron Dermer, un asesor principal del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, tiene previsto viajar a Washington esta semana para sostener conversaciones sobre un alto el fuego, dijo un funcionario israelí, y se estaban haciendo planes para que Netanyahu viajara a la capital estadounidense en las próximas semanas, una señal de que podría haber avances en un nuevo acuerdo. El funcionario se negó a discutir el contenido de la visita y habló bajo condición de anonimato para comentar planes que aún no se habían finalizado.

“¡HAGAN EL ACUERDO EN GAZA. RECUPEREN A LOS REHENES!!!”, escribió Trump en su red social Truth Social la madrugada del domingo. Trump elevó las expectativas el viernes para un acuerdo al decir que podría haber un alto el fuego dentro de la próxima semana.

Trump ha pedido repetidamente a Israel y a Hamás que pongan fin a la guerra en Gaza. A pesar de un alto el fuego de ocho semanas alcanzado justo cuando Trump asumió el cargo a principios de este año, Israel reanudó la guerra en marzo después de intentar que Hamás aceptara nuevos términos sobre los próximos pasos.

Algunos palestinos recibieron con escepticismo la posibilidad de una nueva tregua después de ver cómo se rompía el último alto el fuego.

“Desde el comienzo de la guerra, nos han prometido algo así: Liberen a los rehenes y detendremos la guerra”, dijo Abdel Hadi Al-Hour. “No detuvieron la guerra”.

Trump condena el juicio por corrupción a Netanyahu

El mensaje sobre Gaza no fue la única publicación relacionada con el Oriente Medio de Trump. El sábado por la noche redobló su crítica a los procedimientos legales contra Netanyahu, quien está siendo juzgado por presunta corrupción, calificándolo de “CAZA DE BRUJAS POLÍTICA”.

En la publicación en Truth Social, el presidente de Estados Unidos dijo que el juicio interfiere con las conversaciones sobre un alto el fuego en Gaza.

“(Netanyahu) está en este momento en el proceso de negociar un acuerdo con Hamás, que incluirá recuperar a los rehenes. ¿Cómo es posible que el primer ministro de Israel pueda ser obligado a sentarse en una sala de audiencias todo el día, por NADA?”, escribió Trump.

La semana pasada, Trump pidió que se cancelara el juicio. Fue una enorme interferencia de un aliado internacional en los asuntos internos de un Estado soberano. Y puso nerviosos a muchos en Israel, a pesar de la popularidad de Trump en el país.

El juicio ha sido pospuesto repetidamente a petición de Netanyahu, citando sucesos de seguridad y diplomáticos. El domingo, el tribunal acordó cancelar dos días más de testimonio programados para esta semana.

Un punto de fricción sobre cómo termina la guerra

Las conversaciones entre Israel y Hamás han fracasado repetidamente debido a un punto de fricción importante, si la guerra debería terminar como parte de un acuerdo de alto el fuego.

Mahmoud Merdawi, funcionario de Hamás, acusó a Netanyahu de retrasar el progreso en un acuerdo, diciendo en declaraciones en la aplicación de mensajería Telegram que el mandatario israelí insiste en un acuerdo temporal que liberará sólo a 10 de los rehenes. Un portavoz de Netanyahu, Omer Dostri, indicó que “Hamás es el único obstáculo para terminar la guerra”, sin abordar la afirmación de Merdawi.

Hamás se dice dispuesto a liberar a todos los rehenes a cambio de una retirada total de las tropas israelíes y el fin de la guerra. Israel rechaza esa oferta, señalando que aceptará poner fin a la guerra si Hamás se desarma y se exilia, algo que el grupo se niega a hacer.

La guerra en Gaza comenzó con los ataques del 7 de octubre de 2023 por parte de Hamás, en los que los milicianos mataron a 1,200 personas y tomaron aproximadamente 250 rehenes.

El Ministerio de Salud de Gaza informó el domingo que otras 88 personas han sido asesinadas por fuego israelí en las últimas 24 horas, elevando el número de muertos entre los palestinos a 56,500. El Ministerio, que opera bajo el gobierno de Hamás, no distingue entre milicianos y civiles en su conteo, pero sostiene que más de la mitad de los muertos son mujeres y niños.

La guerra ha desplazado a la mayor parte de la población de Gaza, a menudo múltiples veces, ha destruido gran parte del paisaje urbano del territorio y ha dejado a la gente abrumadoramente dependiente de la ayuda externa, que Israel ha limitado desde el fin del último alto el fuego.

Menos de la mitad de los hospitales de Gaza están siquiera parcialmente funcionales, y más de 4,000 niños necesitan evacuación médica al extranjero, subrayó una nueva evaluación humanitaria de la ONU.

“Estamos exhaustos, estamos cansados. Esperamos a Dios que la guerra termine”, dijo un palestino, Mahmoud Wadi.

Ejército israelí ordena nuevas evacuaciones en norte de Gaza

El Ejército israelí ordenó el domingo una evacuación masiva de palestinos en grandes extensiones del norte de Gaza, hogar de cientos de miles de personas que habían regresado durante el alto el fuego a principios de este año.

El coronel Avichay Adraee, portavoz militar, publicó la orden en las redes sociales. Incluye múltiples vecindarios en el este y norte de la ciudad de Gaza, así como el campo de refugiados de Jabaliya.

El Ejército ampliará sus crecientes ataques hacia el oeste hasta el centro de la ciudad y dijo a la gente que se dirija al área de Muwasi en el sur de Gaza, agregó Adraee.

La actual ofensiva militar israelí tiene como objetivo llevar a los palestinos al sur de Gaza para que las fuerzas puedan operar más libremente para combatir a los milicianos. Los grupos de derechos advierten que ese traslado equivaldrá a un desplazamiento forzoso.