Los vecinos de un barrio de mayoría hispana al norte de Denver lograron que las autoridades locales no renueven la licencia de un dispensario de marihuana.

La decisión de las autoridades locales supone el primer cierre de estos negocios en la capital de Colorado, desde que se implementó en enero de 2014 la ley que permite la venta de marihuana para uso recreativo en el estado.

En abril pasado, un grupo de vecinos del área pidió al Departamento de Impuestos y Licencias de Denver que no se renueve la licencia a Starbuds, una empresa dedicada al cultivo de plantas de marihuana, porque, además del olor, la presencia del dispensario entraba "en conflicto" con los planes de renovación urbana del barrio.

Stacie Loucks, directora ejecutiva del Departamento de Impuestos y Licencias, confirmó hoy que el pedido ha sido aceptado y la licencia de Starbuds caducará definitivamente en 30 días.

En abril pasado, Yael Duarte, una de las organizadoras de la campaña en contra del dispensario, se quejó en una audiencia pública de que las autoridades municipales "no escuchan la voz de la gente ni respetan los derechos de las personas".

En dicha audiencia, representantes del National Western Stock Show, un gran complejo de exposiciones agrícola-ganaderas que se ubica en la misma zona, se expresaron a favor del cierre del dispensario, porque ese tipo de negocios "no ayuda a traer cambios positivos al área".

Loucks confirmó que el dispensario ya no podrá cultivar nuevas plantas de marihuana y que deberá retirar antes del vencimiento de la licencia las 240 plantas que ahora cultivan en su local.

Por su parte, Brian Ruden, uno de los dueños del dispensario indicó en un comunicado que apelará el caso ante la Corte de Distrito de Denver y calificó el hecho como "un ataque a la industria de la marihuana en Colorado".

Según datos oficiales, Elyria-Swansea es el barrio de Denver con la segunda mayor cantidad de negocios con licencias para la venta o producción de marihuana recreativa, en donde se concentra el 40 % del total de dispensario de la ciudad.

En concreto, desde la puesta en marcha de la norma se abrieron 78 dispensarios y centros de cultivo y producción en la zona, donde el 84 % de los 6.400 residentes son latinos.