La ruta para la aprobación de la reforma contributiva quedó abierta y libre de obstáculos ayer, luego de una reunión que sostuvieron los líderes del Ejecutivo y el Legislativo en La Fortaleza. 

El proyecto de reforma contributiva, impulsado por el gobernador Ricardo Rosselló, había encontrado algunos baches en su paso por la legislatura. 

Pero ayer tanto el presidente del Senado, Thomas Rivera Schatz, como el presidente de la Cámara, Carlos “Johnny” Méndez, aseguraron que había un acuerdo para aprobar en ambos cuerpos la reforma, y que pretendían hacerlo tan pronto como la próxima semana, una vez se aclaren los detalles que faltan por determinarse. 

Según se explicó, como parte de la reforma contributiva se aprobaría una baja en las tasas contributivas a los individuos, una baja en las tasas contributivas corporativas, la reducción y posterior eliminación del impuesto “business to business”, y la reducción del IVU a los alimentos preparados. 

De acuerdo con el secretario de Asuntos Públicos, Ramón Rosario, en la reforma se incluirá el crédito por trabajo, medida que no había enfrentado controversias. 

Además, explicó, en la reforma contributiva se incluirá la regulación de las máquinas tragamonedas, aunque se indicó que el dinero que pueda generar de esa fiscalización no estaría atado a pagar ninguna partida en específico. 

“Complacido con la reunión del día de hoy. Estamos trabajando con números correctos, bajo premisas correctas, y estoy convencido de que antes de que termine esta sesión podremos aprobar una reforma contributiva consistente con los compromisos que hicimos, reduciendo, dentro de las circunstancias fiscales que tenemos, la obligación contributiva de los puertorriqueños”, afirmó Rivera Schatz al terminar la reunión. 

“Tenemos la aspiración de que la próxima semana pudiéramos estar aprobando una reforma contributiva. El saldo ha sido positivo para Puerto Rico”. 

“Fue una excelente reunión, tratando de producir la mejor reforma contributiva que pueda tener nuestro país. El norte nuestro es bajar las contribuciones, hacer una reforma contributiva que le haga justicia a las personas de Puerto Rico y que permita el desarrollo económico”, expresó Méndez, agregando que “el trabajo que se ha hecho en equipo ha sido mejorar la reforma que sometió el gobernador”.

En el cónclave de este lunes también participaron los equipos de especialistas económicos del Ejecutivo y el Legislativo, así como los líderes de las comisiones de Hacienda del Senado, Migdalia Padilla, y de la Cámara, Antonio “Tony” Soto. 

En lo que respecta a la reducción del IVU a los alimentos preparados, Rosario explicó que, contrario a la propuesta ejecutiva original de aplicar la reducción solo a transacciones electrónicas, la que se trabajará en la reforma contributiva incluye todo tipo de transacciones. 

Sin embargo, no se había definido aUn cuál sería la reducción al IVU a los alimentos preparados.

Luego de analizar “varios escenarios”, se tomaría la decisión sobre la cifra que quedaría, sin descartar que la misma pueda bajar hasta 0%. 

Este jueves se celebrará otra reunión, en la que esperan ultimar los detalles que están pendientes de completarse. 

Por otro lado, en la reforma contributiva no se incluirá ninguna medida para eliminar o modificar el impuesto al inventario, que representa unos $219 millones en ingresos para los municipios. 

Esa medida se discutiría en un proyecto por separado, y la posible eliminación del impuesto al inventario estaría atada a que se identifique una fuente de ingresos que sustituya los ingresos que reciben los municipios. 

“En el proyecto como tal del nuevo modelo contributivo no va a estar incluida cualquier modificación al impuesto al inventario, sino que se va a trabajar en un proyecto aparte”, explicó Soto. “No hay que radicar un proyecto de ley nuevo, porque en la Cámara de Representantes está vivo en el trámite legislativo el Proyecto de la Cámara 1411, y con ese proyecto ya radicado podemos hacer todas las enmiendas pertinentes para atender el asunto del impuesto al inventario”.

Soto no quiso entrar en detalles sobre dónde se buscarían los $219 millones, que fue la cifra que finalmente se determinó reciben los municipios por concepto del impuesto al inventario, aunque aseguró que los equipos de trabajo están buscando esas posibles fuentes. 

A preguntas de Primera Hora, el representante Soto aclaró que, al menos en este momento, la reforma contributiva no contempla ninguna medida específica para ayudar a reforzar elementos de seguridad como la Policía o los Bomberos, algo que continúa siendo un reclamo de la mayoría de los sectores de la sociedad. 

“Hasta el momento, no. Estamos mirando el pasar un alivio contributivo a la gente, a que Puerto Rico sea una jurisdicción más competitiva. Pero no creo que, hasta ahora, no se ha hablado de alternativas de pasar un beneficio a un sector particular”, respondió Soto. 

Lo que tiene y lo que no 

La reforma traerá una reducción en las tasas contributivas, tanto de individuos como corporativas.

Contiene una medida que reducirá y posteriormente eliminará el impuesto “business to business”.

Trae una reducción del IVU a los alimentos preparados, aunque todavía está por determinarse de cuánto será esa reducción.

Contiene una regulación para que el estado pueda fiscalizar las máquinas tragamonedas.

Deja fuera la eliminación del impuesto al inventario, que se discutirá en otro proyecto separado.