Los científicos han advertido en los pasados días que si bien es cierto que los casos de la nueva ola de COVID-19 han bajado, hay un grupo en el que la tendencia de infecciones continúa alta: los niños entre 0 y nueve años de edad, precisamente los más vulnerables al no poder vacunarse.

El repunte de casos de coronavirus, surgido con la llegada de la variante Delta, la cual es altamente contagiosa, pareciera estar causando más infecciones en los niños, quienes dependen de las medidas de protección de los adultos -entre estas la vacunación y el uso constante de mascarillas-, para estar protegidos.

“La positividad de estos (población pediátrica) no está bajando, lo cual implica que el patrón no lo explica un mayor volumen de pruebas. Importante que los que puedan se vacunen”, advirtió hace unos escasos días el profesor de bioestadística de la Universidad de Harvard y miembro de la Coalición Científica de Puerto Rico, Rafael Irizarry.

Hasta el 30 de agosto, en Puerto Rico había registrado un total de 170,217 casos de contagios de COVID-19 entre pruebas moleculares y de antígenos. De estos casos acumulados, 31,464 son en personas entre 0 y 21 años que, por definición del Departamento de Salud, son los que componen la población pediátrica.

“Esto representa un 18.5% de todas las infecciones documentadas con pruebas moleculares o antígenos. Es interesante ver que al principio las infecciones en este grupo, comparado con la población en general, era de un 13%, luego aumentó a un 15% y ahora tenemos ese 18.5%. Pero esto no es diferente a lo que reportan otros lugares en Estados Unidos donde se están viendo más casos”, expresó por su parte, a Primera Hora, la primera oficial médica del Departamento de Salud, Iris Cardona, al agregar que siempre el efecto de los repuntes se ve marcado en más hospitalizaciones.

La semana pasada la Academia Americana de Pediatría reportó que más de 500,000 niños dieron positivo a COVID en Estados Unidos entre el 5 y 26 de agosto.

En Puerto Rico, el Departamento de Salud analizó el perfil de la población pediátrica que está llegando a los hospitales. Según Cardona, el análisis de ese primer reporte se enfocó en seis semanas comprendidas entre el 27 de junio y el 16 de agosto.

Precisamente, a mediados de junio se confirmó en la isla la presencia de la variante Delta. Un informe reciente de la Coalición de Salud Comunitaria de Puerto Rico (COSACO) ha confirmado mediante vigilancia genómica que el 90% de las infecciones actuales son causadas por la variante Delta. Esta misma organización indica que el promedio de casos recientes en la población de 0 a 19 años es de 848 semanales, siendo los grupos de 5 a 9 años y 16 a 19 los más afectados con 269 y 206 casos, respectivamente.

“Los menores de 10 (años) infectados, en su gran mayoría, no se enferman, pero sí pueden contagiar a otros. La solución a largo plazo es la vacunación que esperemos se apruebe pronto para este grupo”, acotó Irizarry cuando expuso el tema a través de la red social Twitter.

Los niños de 11 años o menos aún no pueden recibir las vacunas contra el COVID-19 por lo que se convierten en una población vulnerable. Las autoridades federales han dicho que la FDA (Federal Drug Administration) debe tener los datos para considerar la autorización de una vacuna para estos menores a finales de septiembre.

Perfil de los pediátricos hospitalizados

Según explicó Cardona, el análisis realizado por el Departamento de Salud abarca unos 42 días entre junio y agosto de este año, los que comprenden las semanas epidemiológicas de la 26 a la 32.

“En ese periodo de seis semanas se lograron identificar 91 hospitalizaciones de pacientes pediátricos con COVID en todos los hospitales de la isla. De estos, cuatro estuvieron en cuidados intensivos por un tiempo prolongado y dos recibieron asistencia de un ventilador”, explicó la doctora Cardona.

Según el análisis, el 29% de las hospitalizaciones ocurrieron en niños entre 1 y 4 años, seguido por los adolescentes entre 15 a 21 años con un 25%.

“Vimos que en esa segmentación el 19% de las hospitalizaciones ocurrieron en menores de un año, el 18% entre los que tienen 5 a 9 años y el 10% entre los que tienen 10 a 14 años... la edad promedio de estos menores hospitalizados en el periodo analizado es de 8 años”, acotó Cardona.

“Tenemos que el número de admisiones fue aumentado por semana haciendo su pico en los primeros días de agosto durante la semana epidemiológica número 31. Vemos que según aumentaban esos ingresos a las clínicas más se admitían nenes entre uno a cuatro años”, subrayó la también infectóloga pediátrica.

El estudio reveló que la minoría de los ingresados tenían condiciones preexistentes. Los que notificaron alguna enfermedad subyacente padecen alguna enfermedad pulmonar crónica como asma, diabetes, hipertensión o discapacidad neurológica.

El 82% de los pacientes pediátricos presentaron algún síntoma relacionado a la enfermedad.

“El más común, con un 68% fue la fiebre, luego está la congestión nasal con un 43% y la tos con un 37%”, manifestó.

“Hay otros malestares como dolor de cabeza, pero por primera vez veo como signo en esta población la dificultad respiratoria entre los síntomas. Tenemos que un 19% tuvo este síntoma y eso antes lo no reportábamos mucho. También hay un 13% que tuvieron náusea o vómitos y un 14% con diarreas”, añadió.

Otro dato que llamó la atención en el análisis es que un 10% de los pacientes pediátricos presentó pérdida de olfato y gusto. “Eso no lo habíamos visto antes”, puntualizó.

Por su parte, Jahzel González, directora de la Sala de Emergencias del Hospital Pediátrico, en Centro Médico, confirmó que con la llegada de la variante Delta se ha percibido un aumento en el flujo de pacientes diagnosticados con COVID. De hecho, enfatizó que se ha visto una tendencia en preadolescentes y adolescentes que no se habían vacunado o habían recibido una dosis parcial del tratamiento y tuvieron que ser hospitalizados.

“Los pacientes que han desarrollado enfermedad más severa son, prácticamente, adolescentes no vacunados que a su vez tienen alguna cormobilidad, como lo es la obesidad, enfermedad respiratoria o crónica... esos siempre tienen más probabilidad de complicarse. Pero estamos viendo que, en sitios como Texas o Florida, en Estados Unidos, hay niños completamente saludables que están en intensivo y muriendo. Por eso hacemos énfasis en la vacunación, porque no queremos eso aquí”, explicó González.

Confirman 16 casos de niños con el Síndrome Inflamatorio Multisistémico

Aunque la probabilidad de desarrollar una enfermedad aguda y la mortalidad a causa de COVID-19 es baja entre menores, la comunidad científica se mantiene alerta a los casos en que se desarrolla el Síndrome Inflamatorio Multisistémico (MISC).

A la fecha en Puerto Rico han fallecido cinco pacientes pediátricos a causa del virus: una niña de 13 años, un adolescente de 16 años, dos jóvenes de 19 años y uno de 21. El adolescente de 16 años estuvo conectado a un ventilador por más de 45 días.

De otra parte, el Departamento de Salud ha identificado en la isla 16 pacientes pediátricos con la inflamación múltiple sistémica asociada al coronavirus. Cuando inició la pandemia, específicamente en abril de 2020, este síndrome se identificó en Europa. No pasó mucho tiempo cuando se identificaron casos en Estados Unidos. Para mayo del año pasado, los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) habían emitido una alerta de lo que estaba ocurriendo.

Para el verano de 2020 se registraron los primeros casos en Puerto Rico. Este tipo de enfermedad se evidencia con análisis de laboratorio y es considerada una condición grave que requiere hospitalización.

Según explicó a Primera Hora la doctora Cardona, los 16 pacientes diagnosticados lograron sobrepasar la crisis, aunque precisó que 12 de estos estuvieron en unidades de cuidado intensivo por cinco días o más. La edad promedio de los perjudicados fue de 8 años.

“Es importante recalcar que este síndrome es una presentación rara, pero seria que puede provocar fatalidades, aunque no hemos tenido ninguna gracias a Dios”, destacó Cardona.

Por su parte, González afirmó que, en efecto, en el Hospital Pediátrico se han ingresado algunos de estos pacientes con MISC, quienes usualmente presentan los síntomas hasta tres semanas después de haber contraído el virus.

“Hay que ser bien precavidos y estar pendiente a los síntomas que van desde fiebre constante por más de 24 horas y síntomas gastrointestinales, hasta cambios en la piel que se manifiesta con un tipo de rash. La situación aquí es que hay niños que lo que tuvieron fue un COVID bien leve o ni siquiera tuvieron síntomas y luego les pasa esto”, explicó la pediatra de sala de emergencias.

Educación: 278 estudiantes han arrojado positivo al virus

Actualmente, en Puerto Rico se ha logrado vacunar con una dosis al 84% de la población pediátrica entre 12 a 15 años. Mientras, un 67% completó el proceso. Este grupo demográfico está compuesto por 145,972 personas.

Asimismo, en la población de 16 a 19 años se ha vacunado con al menos una dosis al 83%, mientras que un 70% cumplió con el tratamiento. En este sector poblacional, hay 155,323 personas.

De otra parte, el Departamento de Educación (DE), informó que de un total de 172 mil estudiantes que están acudiendo a clases presenciales hay reportados 278 casos positivos, lo que representa un .16 % de la matrícula. La agencia informó a Primera Hora, además, que de un total del 36,100 empleados y contratistas en las escuelas se reportan 97 casos. Esto representa un .27% .

La semana pasada el DE informó que el 78% de los casos positivos en estudiantes se habían registrado en menores de 12 años.

“Son 216 las escuelas que han reportado casos y 64 salones o áreas de trabajo han tenido que ser cerradas, no a causa de brotes, sino como medidas preventivas o recomendación de epidemiólogos”, sostuvo en declaraciones escritas el secretario interino, Eliezer Ramos.

“Solo hay una escuela cerrada (nivel elemental que estaba en interlocking) en Mayagüez. Este es un plantel que está en modalidad virtual como medida preventiva a recomendación de epidemiólogos y tras acuerdo con los padres”, agregó.