La Cámara de Representantes de Puerto Rico aprobó este lunes el Proyecto 2020 que enmienda el "Plan de Reorganización del Departamento de Corrección y Rehabilitación", y autoriza al Secretario de Corrección a que realice acuerdos de colaboración con corporaciones sin fines de lucro e iglesias y de esta manera los confinados puedan reunirse con familiares, amigos o consejeros en sus instalaciones.

La medida, de la autoría del presidente de la Cámara Carlos Méndez y los representantes José Enrique Meléndez, María Milagros Charbonier, y José Pérez, busca mejorar el comportamiento de los confinados y disminuir los efectos de separación de la familia creados al recibir sus sentencias.

En un comunicado, Melendez agradeció a legisladores de ambos partidos "haber votado a favor de la medida. Todos, de alguna manera u otra, hemos escuchado la triste historia de cómo el entorno familiar se afecta al separar a un confinado de su núcleo familiar".

"Como madres, abuelos, hijos y cónyuges se afectan con el proceso, el cual se torna en muchas ocasiones difícil y tormentoso emocionalmente. Espero que los confinados aprovechen esta valiosa oportunidad por el bien de sus familiares y por el bienestar de ellos en el transcurso de su rehabilitación", expresó.

Por su parte, Charbonier añadió el derecho a la rehabilitación es de "carácter constitucional y medidas como esta, que hacen viable la rehabilitación, no deben ser obstaculizadas y empañadas por asuntos mínimos de presupuesto o meros discursos políticos".

"Un confinado no rehabilitado en la libre comunidad es un problema que le afecta a toda la sociedad. Y es triste que miembros del Partido Popular se hallan expresado en contra de la medida porque el derecho a relacionarse con sus hijos e hijas en un ambiente que promueva el pleno desarrollo familiar es la mejor manera de provocar su rehabilitación", subrayó.

"Con proyectos como este es que le demostramos nuestro verdadero compromiso a la comunidad de confinados y no con promesas durante las campañas políticas. Esta ley es un privilegio y una oportunidad brindada que ellos, los confinados y confinadas, saben que deben utilizar por el bien de ellos y sus familias", concluyó.