La presidenta del Centro Unido de Detallistas (CUD), Enid Monge de Pastrana, puntualizó esta mañana que una de las medidas de mayor impacto negativo a los pequeños y medianos comerciantes lo ha sido la implantación del IVU Loto, un mecanismo para impulsar la fiscalización en el cobro del Impuesto sobre las Ventas y Usos a través de un sorteo.

Durante una vista pública de la Comisión de Hacienda y Presupuesto de la Cámara de Representantes, la líder del CUD llamó la atención sobre los gastos que representa para los comercios captar el IVU y tramitar el IVU Loto. Agregó que un comercio afiliado al CUD puede realizar hasta 1,000 transacciones diarias, lo que se traduce en un gasto anual por concepto de papel de $13,690, sin contar otros gastos relacionados al equipo como el reemplazo de batería y el mantenimiento.

“El IVU Loto conlleva costos directos e indirectos significativos, tales como, pero no limitados a, la generación de llamadas para cada transacción, el costo de papel, baterías, mantenimiento y aquellos relacionados a los servicios profesionales necesarios para el cálculo de las partidas a ser remitidas a Hacienda, así como la preparación de las planillas mensuales requeridas”, indicó.

La comerciante señaló que otro de los mayores problemas que enfrentan los pequeños y medianos comerciantes es la obligación de instalar el programa para registrar el IVU a pesar de que muchos de ellos no son agentes retenedores del gravamen. Monge de Pastrana explicó que los comercios que tienen ingresos brutos de menos de $50,000, como salones de belleza, colmados, panaderías y floristerías, no tienen que retener el IVU pero se les exige tener el sistema para hacerlo.

“Nos informan que actualmente se le requiere la instalación del terminal fiscal y la radicación de planillas del IVU a empresas de servicios profesionales tales como centros de cuido de envejecidos y niños, contadores y otros, aunque no sean estos agentes retenedores de IVU y su planilla refleje negativo”, expresó durante la audiencia, presidida por el representante Rafael “Tatito” Hernández Montañez, para investigar los planes y programas de cobro, auditoría y fiscalización del IVU, y la conceptualización e implementación del programa de IVU Loto, entre otras cosas.

“Este requerimiento constituye una imposición innecesaria que resulta en un costo adicional y significativo para miles de pequeños comercios. En otras palabras, que bajo los estatutos legales que dan base a la implementación del IVU y el IVU Loto estos comercios están exentos de cobrar y retener la partida del IVU, siendo el propio Hacienda el que emitiera las certificaciones de registro correspondientes que establecen que los mismos no son agentes retenedores del IVU”, reiteró Monte de Pastrana.

El presidente de la Asociación de Industriales del Pan, Antonio Meléndez Vargas; la presidenta de la Asociación de Industriales de Puerto Rico, Waleska Rivera, y el presidente de la Cámara de Comercio de Puerto Rico, Pablo Figueroa, también participaron en la vista pública, que tuvo lugar en el salón de audiencias 1 de la Cámara.

Meléndez Vargas criticó el desconocimiento en torno al funcionamiento del impuesto, la falta de orientación a los comerciantes y los costos adicionales que representa el Ivu Loto. Figueroa, por su parte, presentó unas críticas similares y expresó preocupación ante la posibilidad de que se cambie el IVU por el IVA (Impuesto al Valor Agregado).

El presidente de la Comisión de Hacienda y Presupuesto indicó que, para atender los problemas en la captación del IVU, se realiza un estudio abarcador sobre las distintas alternativas viables. El legislador adelantó que, entre las alternativas que se evalúan está simplificar la forma en que los comerciantes pagan las patentes y la contribución mueble del Centro de Recaudaciones de Impuestos Municipales (CRIM).

Según Hernández Montañez, es necesario evaluar la posibilidad de modificar el sistema para que el dinero que los comerciantes pagan una vez al año por concepto de patentes y de contribución mueble se remita automáticamente a Hacienda en cada transacción. El legislador explicó que esto significaría aproximadamente un centavo de cada dólar y eliminaría el trabajo de llenar dos planillas anuales.

También indicó que se evalúa la posibilidad de cambiar el sistema de Ivu Loto a algo parecido a una tarjeta de recompensas (rewards card) como las que se utilizan en muchos comercios para acumular puntos y obtener descuentos. Según el representante, el consumidor registraría sus compras en esta tarjeta y, en vez de recibir un recibo con el IVU Loto, se le notificaría inmediatamente si recibió un premio.

Hernández Montañes dijo que esto podría acompañarse con la posibilidad de que el consumidor redima el premio en el establecimiento o el otro lugar.