El Departamento de Salud investiga 210 contagios generados en 34 brotes en instituciones educativas, particularmente concentradas en pueblos de la región de Arecibo y Ponce, esto en momentos en que la positividad de casos de COVID-19 ha aumentado consistentemente durante la última semana.

Desde el fin de semana la Primera Oficial de Epidemiología de la agencia sanitaria, Melissa Marzán, ha señalado que se monitorea el aumento en la incidencia de casos durante los últimos siete días entre los grupos de 0 a 9 años, 10 a 14 años y 15 a 19 años, los únicos demográficos que actualmente mantienen una positividad mayor al 5%. En términos generales también se marca una leve alza de 3.7% (9 marzo) a 4.8% (16 de marzo).

Por ejemplo, entre el grupo de 0 a 9 años la positividad para el miércoles es de 5.3%. Mientras, el grupo de 10 a 14 años ascendió a 7%, en comparación al 4.4% que reportaba hace siete días. Los de 15 a 19 años también reflejan un aumento de 3.2% a 7.9%. Estos números muestran un contraste con la positividad en grupos como los de 30 a 39 años (3.9%), de 40 a 64 años (4.2%), de 65 a 74 años (3.1%) o 75 años o más (3.9%).

“Vemos también un cambio en los datos para transmisión comunitaria. El domingo hablamos de ocho municipios en un alto nivel de transmisión y hoy tenemos 14 en esa clasificación. Muchos de estos casos se han conglomerado en pueblos de la montaña y el oeste de la isla y en regiones como Arecibo y Ponce”, sostuvo la experta al mencionar que algunos de los pueblos son Camuy, Utuado, Las Marías, Quebradillas, San Sebastián, Yauco, Sabana Grande, entre otros.

En cuanto a los pediátricos señaló que se han identificado 34 brotes de coronavirus en instituciones educativas, las cuales comprenden cuidos de niños, preescolares, K-12 y universidades. Sin embargo, hizo la precisión de que se están viendo más contagios entre grupos no vacunados (0 a 4 años) o entre aquellos que no han completado el proceso de inoculación o ya requieren refuerzo.

“Además, entre esos 34 brotes tenemos 11 alertas bajo investigación porque una vez se identifican conglomerados se verifica a nivel epidemiológico si son contagios asociados a las escuelas”, sostuvo Marzán al precisar que estos brotes en particular son de K-12.

En total hay 210 contagios detectados entre los brotes identificados y en algunos planteles han tenido que cerrar salones para enviar a cuarentena al grupo. Marzán precisó que esto ha ocurrido particularmente en aquellos ambientes en los que hay niños pequeños en los que identificar un contacto cercano es más complicado. En estos casos, cuando se suma el factor de que los niños no están vacunados, el tiempo de cuarentena es de 14 días. Si se trata de grupos en los que hay niños vacunados, el proceso se extiende por siete días. Sin embargo, para aquellos que no han culminado el proceso (porque no tienen refuerzo o no han completado la fase primaria), la cuarentena es de 10 días.

Insistió en la importancia del acceso a la vacunación entre estos grupos y la realización de pruebas de detección.

“Ahora mismo en las escuelas hay dos estrategias para detectar casos: pruebas aleatorias y las pruebas que se realizan a través de Salud Escolar con la Cooperativas de Laboratorios de la Comunidad”, indicó al preciar que, además, esta semana hay 83 eventos de pruebas de detección en diversos puntos a través de la isla.

“La gente ha dejado de hacerse las pruebas y nuestra exhortación es que si hay un contacto cercano vayan a hacerse la prueba. Y que en el caso de aquellos que se hacen las pruebas caseras, informen a través de la página de Salud si hay casos positivos”, puntualizó.

Actualmente entre pruebas moleculares y de antígenos se hacen 10,600 pruebas al día, un número relativamente bajo a las 40,000 o 50,000 que se realizaban entre diciembre y enero cuando los casos de COVID-19 se elevaron a cifras históricas en la isla, esto a causa de la rápida propagación de la variante ómicron.

El presidente del Colegio de Médicos Cirujanos, Víctor Ramos, confirmó que el aumento de casos pediátricos en la zona central y oeste de la isla.

“Sí se están viendo más casos en estos pueblos y, ciertamente, era algo que sabíamos que podía suceder con las flexibilizaciones y porque hay más interacción. Lo importante es que estemos vigilantes para que no se comprometa el sistema hospitalario”, indicó el también pediatra.

Al igual que la epidemióloga, Ramos instó a los encargados de los menores a vacunarlos contra el COVID-19. “Hay suficiente evidencia y es clara de que la vacunación es lo más importante para proteger. Así que los que no han completado el proceso este es el momento de que vayan a hacerlo para proteger a los niños y a sus familiares, particularmente a los abuelitos que muchas veces son cuidadores”, sentenció.

11% de los casos de COVID son del sublinaje BA.2 de ómicron

En momentos en que la comunidad científica a nivel mundial se mantiene vigilante al desarrollo de casos a causa del sublinaje BA.2 de la variante ómicron, el Departamento de Salud confirma que los casos detectados en Puerto Rico correspondientes a este grupo saltaron del 1% al 11% de febrero a marzo. En total, se han secuenciado seis muestras positivas y no se ha reportado ningún fallecimiento vinculado al sublinaje.

Así lo sostuvo Marzán al precisar que esta semana se recibirían los resultados de otros muestras que se están secuenciando en laboratorios.

La subvariante BA.2 avanza en el mundo y, aunque no se asocia a una enfermedad más severa o letal que la ómicron original, sí se le atribuye tener ventaja en términos de transmisibilidad.

Esto ha llevado a que países como Inglaterra, China, Japón y Dinamarca, entre otros, vean un aumento en casos, mientras a otros se les ha hecho potencialmente más complicado desacelerar la disminución de casos. La situación en Estados Unidos, también se mantiene en constante monitoreo pues el BA.2 empieza a ganar terreno.

“Hemos visto esa tendencia aquí también pues en la primera evaluación del 29 de enero estaba en 1% y la semana del 28 de febrero era de un 11%. Ahora mismo estamos esperando resultados de nuevas secuenciaciones”, determinó.

En cambio, Marzán fue enfática en que la dosis de refuerzo es clave para provocar una protección contra cualquiera de los sublinajes existentes de ómicron. Actualmente, el 86% de las personas aptas para vacunarse (5 años en adelante) completaron la serie primaria de inoculación. En cambio, según datos de Salud, de las 2,349,191 personas hábiles para ponerse el “booster”, todavía hay 981,693 que no se han puesto esa dosis de refuerzo.

“Aquí lo importante es que la ciudadanía sepa que las herramientas de prevención siguen siendo las mismas. En cuanto a las escuelas, sabemos que los estudiantes deben mantenerse con mascarillas dentro de los lugares cerrados para prevenir contagios”, acotó.