La Cámara de Representantes, en la sesión ordinaria de este viernes, aprobó en votación partidista los dos proyectos que prohíben el discrimen por orientación sexual e identidad de género.

Ambas medidas fueron refrendadas por la mayoría parlamentaria, que controla el Partido Popular Democrático, y con la oposición de la delegación de la minoría del Partido Nuevo Progresista, pero con la excepción de su portavoz y expresidenta cameral Jennifer González, quien le votó a favor.

Nardem Jaime fue el único representante popular que votó cruzado por ambas medidas: a favor del proyecto del Senado 238, que prohíbe el discrimen en el empleo por orientación sexual, y en contra del Proyecto de la Cámara 488, que extiende la protección de la Ley 54 de violencia doméstica, a todo tipo de pareja.

Además, el representante José “Nuno” López, del PNP, voto en contra del P del S 238, pero a favor del P de la C 488.

Ambas medidas, que fueron objeto de múltiples enmiendas para atender las reservas de algunos legisladores populares y las críticas adversas de grupos religiosos, recibieron 29 votos a favor y 22 en contra.

La Cámara también aprobó, con el margen mínimo de 26 votos, los proyectos senatoriales que conforman la reforma legislativa. Los representantes populares Eduardo Ferrer y Carlos Vargas, votaron en contra de esos proyectos.

El paquete de medidas aprobadas en la Cámara pasa ahora al Senado, que deberá concurrir o rechazar las enmiendas camerales. De haber diferencias entre el Senado y la Cámara en alguna de estas medidas, se activará un comité de conferencia que armonice las versiones en ambos cuerpos legislativos.

El P del S 238 y los proyectos de reforma legislativa fueron aprobados originalmente en el Senado, mientras que el 488 salió de la Cámara y será evaluado por primera vez en el Senado.

Los dos proyectos que amplían la protección contra del discrimen en Puerto Rico fueron presentados por el presidente de la comisión cameral de lo Jurídico, Luis Vega Ramos.

“Pocas veces en la vida de un legislador o legisladora se tiene la oportunidad de hacerle justicia, de proteger la vida, el empleo y la integridad física, muy directa y real, a un sector sustancial y discriminado de la sociedad”, dijo Vega Ramos. “Ha sido un camino largo y difícil el que nos ha llevado aquí”, agregó.

Planteó que en Puerto Rico, la vida de todo ser humano, vale lo mismo y en sus relaciones de pareja debe tener, y luego que esto se convierta en ley va a tener, la misma protección de agresión que se da en la relación de pareja”, al aludir al P de la C 488.

“Se trata de proteger a la gente, no de santificar o condenar relaciones”, proclamó Vega Ramos en su exposición de defensa a la medida durante el debate en el hemiciclo cameral.

Sobre el P del S 238, Vega Ramos opinó que establece el marco en contra del discrimen por orientación sexual e identidad de género en el ámbito del empleo.

“Busca establecer fuera de duda razonable, algo que no se pudo establecer por una imprudencia, que es que nadie puede ser discriminado o discriminada en Puerto Rico por su orientación sexual, por su identidad de género a la hora de moverse en el mundo del empleo”, destacó.

La postura del PNP la expuso la representante María Milagros Charbonier, quien amparó sus argumentos sobre bases religiosas, por lo que comenzó su mensaje agradeciendo “la deferencia que han tenido con los pastores y la iglesia en esta Cámara”.

“La Iglesia de Dios tiene una historia de trabajo social, y si esa iglesia no puede ser escuchada. Si esa iglesia de Dios no puede ser escuchada, yo tampoco quiero estar en este parlamento”, afirmó Charbonier, quien insistió en que el 238 y 488 están incluido en las leyes civiles de Puerto Rico y en la federal ley de discriminación.

Charbonier justificó las enmiendas introducidas en la Cámara y sostuvo que “ya sabemos que es un buen proyecto”, refiriéndose al 238.

“Gracias a Dios que el proyecto ampliamente enmendado 238 excluye las iglesias, ha sido enmendado ampliamente, pero no puedo darle el voto en este momento, cuando venga en concurrencia entonces le daré mi apoyo”, declaró para expresar su desconfianza en lo que pueda hacer el Senado cuando reciba el proyecto con las enmiendas la semana entrante.

El representante Héctor Torres Calderón, también defendió la postura del PNP y argumentó que “como cristiano y padre de tres hijos, no hay forma ni manera que yo le pueda dar un voto a favor de esta medida”.

Rafael Rivera Ortega, también del PNP, expresó que “estaré votando en contra de esta medida honrando los valores y los principios que mis padres me enseñaron”.

Waldemar Quiles, otro legislador del PNP, calificó el proyecto 238 como “malo, torcido y perverso”. Afirmó que “la finalidad es otra: llegar poco a poco a lo que quieren los amigos…lo que persigue esto es denme esto, que después buscamos lo otro”.

En defensa de los proyectos tomaron la palabra varios legisladores del PPD que se habían identificados como objetores de ambas medidas.

 El vicepresidente cameral Roberto Rivera Ruiz de Porras agradeció al presidente Jaime Perelló la confianza y el espacio que le dio, a pesar de que se había expresado “abiertamente en contra”.

“Gracias a usted que me dio ese espacio para hablar con todos los grupos y a los dos sectores. Hoy me siento satisfecho que ha habido en este proyecto un consenso de ambas comunidades”, expresó Rivera Ruiz de Porras.

Lydia Méndez también se expresó a favor de ambas medidas y se manifestó en contra de todo discrimen, al anunciar su voto favorable.

Nardem Jaime, otro de los populares opositores originales a las medidas, expresó que “el proyecto 238 viene con vicios, viene con insultos y viene con muchas cosas, con las laceraciones del Senado”.

Jaime agradeció a todos sus compañeros de delegación popular por lograr un consenso de todos los grupos.

“Reconozco el espacio que nos ha dado el presidente de la Cámara. En un principio me opuse al proyecto por el lenguaje que tenía, pero hoy estoy votando a favor”, dijo Jaime.

El proyecto 238 del Senado fue aprobado con enmiendas.