El presidente del Partido Popular Democrático (PPD), José Luis Dalmau Santiago, rechazó que la colectividad haya guardado silencio sobre la polémica que rodea al alcalde de Ponce, Luis Irizarry Pabón, por las expresiones de la primera dama del municipio, Miyady Velázquez Pagán, en contra de la comunidad LGBTQ+ y de resistencia religiosa a tradiciones culturales, como la de los característicos vejigantes.

Dalmau Santiago no precisó si favorece o rechaza las expresiones, mientras que los tres candidatos a la presidencia del PPD –la alcaldesa de Morovis, Carmen Maldonado y Luis Javier Hernández, ejecutivo municipal de Villalba; y el representante Jesús Manuel Ortiz-, se distanciaron de la controversia levantada por Velázquez Pagán.

Los candidatos se refirieron al PPD como un partido “inclusivo” y recordaron que, en su próxima asamblea general, el domingo 26 de febrero, elige por primera vez a un portavoz de la comunidad LGBTTQ+ a su junta de gobierno.

“Es la primera vez que nos hacen una pregunta y yo la contesto de la siguiente manera: ella hizo unas expresiones y el alcalde también hizo unas expresiones. Les contestaron las preguntas a los medios de comunicación y yo creo ahí acaba eso”, dijo Dalmau Santiago a preguntas de periodistas luego de tener un almuerzo hoy con los tres candidatos a la presidencia de la Pava.

-¿Pero usted coincide, está de acuerdo con las expresiones de la primera dama de Ponce, de que la homosexualidad es casi como una enfermedad?, le preguntó Primera Hora al líder popular.

“Yo respeto la manera de pensar de cada quien, yo tengo la mía. No puedo pensar que pienso igual que algunas personas, referente a distintos asuntos y como presidente del partido he dicho que, si alguien hace una declaración, esa persona es responsable por las declaraciones que hizo, no es que yo las comparta o las rechace”, sostuvo Dalmau Santiago.

El representante Ortiz, por su parte, estableció que discrepa “absolutamente” de las expresiones de la primera dama ponceña.

“Mi posición es totalmente contraria, no estoy de acuerdo con esa declaración y me parece que nuestro partido es uno de tradición de defensa de derechos humanos y eso está claro para mí”, indicó el legislador.

La alcaldesa de Morovis también se alejó de la controversia y dijo que el PPD recientemente aprobó un nuevo reglamento que “habla de la inclusión en nuestro partido”.

“Las palabras de los compañeros se le respetan, no estoy tampoco conforme con esto. Creo que tenemos que ser un partido inclusivo como lo que acabamos de aprobar en ese reglamento y darles espacio a todos por igual, todos somos seres humanos”, sostuvo Maldonado.

“Es una pena que tengamos que llegar a que estas cosas ocurran”, dijo cuando se le preguntó por la alegada remoción de la obra con figuras de vejigantes “El alma de nuestro pueblo” del área de descanso de la escalera principal de la Casa Alcaldía por, supuestamente, considerarla como “algo pagano”.

La obra del artista Alfredo Bauzá le había sido comisionada por el fenecido alcalde Rafael Cordero Santiago.

“Estamos en el siglo 21. Hemos visto cómo la vida ha cambiado día tras día y estamos hablando de inclusión, tenemos que ser inclusivos y si hablamos de inclusión debemos respetar la mentalidad de cada ser humano”, agregó Maldonado.

El alcalde de Villalba dijo, a su vez, que como presidente del comité de reglamento trabajó en las enmiendas para hacer de la Junta de Gobierno “una más inclusiva”, con sillas para las comunidades LGBTQ+, organizaciones de base de fe y personas con discapacidades físicas, entre otras.

“Este partido, precisamente, en la asamblea del domingo le va a dar voz a muchas personas que han estado luchando por ser iguales. Creo que el discurso de marcar o etiquetar a alguien, venga de quien venga, está mal... La Constitución de Puerto Rico dice que todos los seres humanos deben que ser vistos por igual, que no puede haber discrimen por raza, por sexo, condición social, orientación sexual. No debe haber ese discrimen y, por otro lado, existe derecho a la intimidad. Todo eso se debe proteger”, agregó.

Dalmau Santiago indicó que en cada una de las 40 asambleas distritales que el PPD ha celebrado en las últimas dos semanas se selecciona un delegado que tendrá voto en la asamblea general para seleccionar a la persona que ocupe la nueva silla para la comunidad LGBTTQ+.