Ante el reclamo de empleados municipales para que no se obstaculice el proceso de organización sindical, la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, anticipó este domingo que en dos semanas podría tener listo su plan para permitir que estos trabajadores puedan afiliarse a una unión.

Cruz señaló que el gobierno municipal se encuentra en el “proceso de evaluación legal” para determinar de qué manera cumplirá su compromiso de campaña de permitir que los empleados del ayuntamiento puedan tener representación sindical.

“Nos reiteramos en que los empleados tienen derecho a escoger quiénes los representen”, manifestó la alcaldesa a este medio durante la FINA (Federación Internacional de Natación) Diving Grand Prix, en el Natatorio de San Juan.

Cruz emitió sus declaraciones minutos después que una veintena de empleados municipales la emplazaran a expresarse públicamente sobre su compromiso de campaña, y denunciaran que algunos trabajadores “se han sentido intimidados” por acciones tomadas por varios supervisores que se oponen al proceso.

Los empleados afirmaron que algunos de esos supervisores fueron nombrados por la pasada administración novoprogresista de Jorge Santini.

“La organización sindical de los trabajadores municipales es un acto de justicia que nos proporcionará la seguridad y estabilidad en el empleo que jamás hemos tenido”, dijo en conferencia de prensa Alicia Colón, enfermera práctica con 20 años de labor en el Municipio de San Juan.

“Más que en cualquier otro centro de trabajo, nuestros empleos están sujetos a vaivenes políticos, partidistas y presupuestarios que no solo ponen en riesgo la seguridad del trabajo, sino que afectan los planes económicos familiares y la estabilidad emocional de los trabajadores”, abundó.

Cruz destacó que en las pasadas semanas, miembros de algunas uniones han orientado a los empleados en sus centros de trabajo sobre la organización sindical, y dijo que ella instruyó a todo el personal de Recursos Humanos a que permitan que el proceso sea “equitativo y libre de represalias”.

“Los supervisores tienen que tener bien claro que los tiempos donde se veía el intercambio con las uniones como que era de confrontación se acabaron”, aseveró la ejecutiva municipal.

“Aquí no hay razón para sentirse intimidado. El Municipio de San Juan apoya el proceso de orientación de sindicación. El hecho de que ahora mismo los empleados no tengan la facultad de ejercer ese derecho como lo tienen (los empleados del gobierno central) bajo la Ley 45 no quiere decir que ese proceso no esté encaminado”, añadió.

El gobierno municipal de San Juan tiene cerca de 5,200 trabajadores que podrían organizarse sindicalmente. De esos trabajadores, 1,200 pertenecen al sistema de Salud Municipal, y se organizarían como parte de la Unión General de Trabajadores (UGT), mientras que 4,000 laboran en otras áreas de servicios y se afiliarían al Sindicato Puertorriqueño de Trabajadores (SPT).

Manuel Perfecto, presidente de la UGT, y Roberto Pagán, líder del SPT, estuvieron presentes en la rueda de prensa, y manifestaron que confían tener en las próximas semanas las firmas del 50% de los empleados municipales apoyando la petición de sindicación.

Una vez alcancen esa cifra, explicó Pagán, buscarán reunirse con la alcaldesa para discutir los próximos pasos a seguir en el proceso.

Ambos líderes sindicales estimaron que, si no surge algún inconveniente, podrían culminar la organización en agosto.

Para los empleados, las mejores condiciones laborales que esperan obtener a través de la sindicación se traducirán en mejores servicios.

“Estamos convencidos de que, con mejores condiciones de empleo, podremos contribuir aún más al desarrollo de nuestra capital, y aportar al proceso de participación ciudadana asegurando los servicios de calidad que debe proveer la ciudad a todas y todos los sanjuaneros”, dijo Héctor Figueroa, quien desde hace 12 años se desempeña como chofer de vehículos pesados.

Los empleados del Municipio de San Juan confían en que, al unirse sindicalmente, podrían evitar que se repita la historia de Julio Nieves González, quien con solo un año de laborar en el ayuntamiento como chofer de vehículos pesados sufrió un accidente en el empleo en el que perdió parte de los dedos de una de sus manos, y tuvo que permanecer fuera del trabajo un año recibiendo asistencia de la Corporación del Fondo del Seguro del Estado.

Debido a su ausencia a raíz de ese incidente, ocurrido hace nueve años, Nieves González perdió su clasificación como empleado regular, y desde entonces ocupa el puesto como empleado transitorio.

“No me dieron la permanencia. Los mismos beneficios que están recibiendo los compañeros míos cuando les dieron la permanencia, no los he podido recibir”, afirmó Nieves González