Muchas veces escuchamos hablar de ellos en temporada de sequía, cuando llega el racionamiento inminente o si llueve demasiado y hay que abrir alguna compuerta de los que tienen represa.

En total, Puerto Rico cuenta con 36 embalses, todos de fabricación humana, pues la Isla no cuenta con lagos naturales. Todos son propiedad del gobierno. Además, hay varios embalses pequeños privados. También, existe un proyecto para crear el embalse Valenciano, en el área de Juncos, que proveería alivio al uso del Lago Carraízo.

Pon atención a los detalles de cada uno para que conozcas por qué son tan necesarios.

Embalse Carraízo
Embalse Carraízo (Carlos Rivera Giusti)

El embalse Carraízo, o Lago Loíza, está localizado en Trujillo Alto y constituye una de las principales fuentes de abasto de agua para la zona metropolitana de San Juan.

Sus aguas son parte del sistema del Río Grande de Loíza, que tienen su origen por la zona montañosa de San Lorenzo y Caguas, y terminan en la costa de Loíza.

Se terminó de construir en 1954, con el propósito de generar energía hidroeléctrica, aunque ese uso se descartó posteriormente. Además de fuente de agua, sirve para actividades de pesca y recreativas.

Inicialmente tenía una capacidad estimada en más de 7,600 millones de galones de agua. Sin embargo, con la acumulación de sedimentos en su fondo a través del tiempo, actualmente se estima que su capacidad se ha reducido en 53.7%.

Se le hicieron trabajos de dragado en 1997-98, y más recientemente en el 2015.

Embalse La Plata.
Embalse La Plata. (Carlos Rivera Giusti)

El Lago La Plata, ubicado en un área montañosa entre los municipios de Naranjito, Toa Alta y Bayamón, también sirve de fuente de agua a la zona metropolitana de San Juan y otros pueblos cercanos. Se creó en el 1974, con una capacidad estimada de más 10,700 millones de galones de agua. Se estima que actualmente ha perdido 28.5% de su capacidad.

Es parte de la cuenca del río del mismo nombre, cuyas aguas comienzan desde varios municipios de la zona montañosa central. Se extiende por unas siete millas, con profundidades máximas de 100 pies.

Además de servir de fuente de agua, es un área de recreación y pesca, y es parte de un refugio de vida silvestre.

En el 2015 se le hicieron trabajos de extracción de sedimentos. A mediados de 2020, se anunció otro dragado, con una inversión de $9.4 millones.

El jueves, el lago Guajataca entró en el nivel de ajustes operacionales, por lo que la AAA pide moderación a sus clientes del área oeste. (GFR Media)
Lago Guajataca.

El Lago Guajataca, localizado entre San Sebastián, Quebradillas e Isabela, fue terminado en el 1928, para servir de fuente de agua para la zona noroeste. Tiene una capacidad estimada en más de 11,140 millones de galones de agua. Se estima que ha perdido 16.3% de su capacidad.

Se alimenta de las aguas del Río Guajataca, que bajan desde las montañas de Lares y San Sebastián. Se extiende por cerca de cinco millas y su profundidad máxima es de 65 pies.

Sus aguas se usan para servir a los municipios del noroeste y para riego. Sirve además de zona recreativa, de pesca y práctica de deportes náuticos. En sus alrededores hay varias áreas de recreación, así como una reserva y un refugio de vida silvestre.

Con el huracán María, parte de su dique sufrió daños y fue necesario someterlo a una reparación que se extendió por varios meses y obligó a bajar el nivel de las aguas en el lago.

Está bajo administración de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).

Lago Cerrillos.
Lago Cerrillos. (Suministrada)

El Lago Cerrillos, en Ponce, se terminó de construir en 1992, como fuente de abastecimiento de agua y como medida de control de inundaciones. Tiene una capacidad estimada de sobre 15,600 millones de galones de agua, de los que se usan unos 8,100 millones para uso doméstico en los municipios de Ponce y Peñuelas y otras áreas del sur, y 5,500 millones para control de inundaciones.

Se alimenta de las aguas de los ríos San Patricio y Cerrillos que bajan desde las zonas montañosas de Ponce.

Además de servir de fuente de agua para consumo humano y control de inundaciones, es un área de recreación, pesca y práctica de deportes náuticos.

Está bajo la administración del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA).

Al momento, la AAA no contempla racionar el servicio a los clientes del lago de Cidra, distribuidos entre este pueblo y partes de Caguas, Aguas Buenas, Bayamón y Guaynabo.
Lago de Cidra. (Ramón “Tonito” Zayas)

El Lago Cidra, ubicado en el municipio del mismo nombre, fue de los primeros que se crearon para servir de fuente de agua y todavía hoy sirve a varios municipios, incluyendo a Aguas Buenas, Caguas, Cayey y la zona metropolitana de San Juan. Tiene una capacidad estimada de sobre 1,700 millones de galones de agua. Actualmente, se estima ha perdido 31.9% de su capacidad.

En el 2015, se hicieron allí trabajos de extracción de sedimentos.

Lago Patillas.
Lago Patillas. (Archivo)

El Lago Patillas, se terminó de construir para 1914, para servir a sistemas de riego de la zona sureste. Se alimenta de las aguas del Río Grande de Patillas, y tiene una capacidad estimada de sobre 4,600 millones de galones de agua. Se estima ha perdido 26.3% de su capacidad.

Además de servir para los sistemas de riego del sureste, también suministra agua para consumo de la población a varios acueductos.

Está bajo administración de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).

Lago y represa de Toa Vaca.
Lago y represa de Toa Vaca. (Isabel Ferré Sadurní Photography)

El Lago Toa Vaca, en Villalba, se terminó en 1972. Se nutre de un sistema de quebradas que bajan desde las zonas montañosas de ese municipio. Tiene una capacidad estimada de más de 18,180 millones de galones de agua. Actualmente se estima que ha perdido 61% de su capacidad.

El hallazgo se produjo a las 9:20 a.m., a orillas del Lago Carite, (en la foto) embalse de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados. (Archivo / GFR Media)
Lago Carite.

El Lago Carite, en Guayama, fue creado en 1913, como fuente de agua potable y para riego. Se nutre de las aguas del Río La Plata, en su parte que transcurre por zonas más elevadas. Tiene una capacidad estimada de sobre 3,600 millones de galones de agua. Se estima ha perdido 28.1% de su capacidad.

Es un área de recreación y pesca.

Está bajo administración de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).

Lago Caonillas.
Lago Caonillas. (Suministrada)

El Lago Caonillas, en Utuado, fue construido en 1948. Se nutre de varios ríos y quebradas que bajan de las montañas de Utuado y Jayuya y son parte de la cuenca que más abajo se convierte en el Río Grande de Arecibo, y que incluye al Lago Dos Bocas. Tiene una capacidad estimada de más de 14,900 millones de galones de agua. Se estima ha perdido 33.6% de su capacidad. Se extiende por unas tres millas y su profundidad máxima es de 200 pies.

Sus aguas se usan para producir energía eléctrica en la Central Caonillas 1. También es área de recreación y pesca.

Está bajo administración de la Autoridad de Energía Eléctrica (AEE).

El embalse Río Blanco, en Naguabo, es uno de los embalses de reciente creación. Se terminó en 2010, y se construyó fuera del cauce del Río Blanco que lo alimenta, lo que ayuda a evitar su sedimentación. Tiene una capacidad estimada de 1,450 millones de galones de agua.

Sus aguas se usan para consumo de las personas en los municipios de Naguabo, Humacao, Yabucoa, Las Piedras, Vieques y Culebra.

El embalse Fajardo, localizado en este municipio, también es de los embalses de reciente creación. Se terminó en 2006, fuera del cauce del Río Fajardo de cuyas aguas se nutre, lo que ayuda a evitar su sedimentación. Tiene una capacidad estimada de 1,450 millones de galones de agua.

Sus aguas se usan para consumo de la gente en los municipios de Fajardo, Luquillo y Ceiba.

Hidroeléctrica en el Lago Dos Bocas.
Hidroeléctrica en el Lago Dos Bocas. (Archivo)

El Lago Dos Bocas, localizado entre Utuado y Arecibo, y cuyas aguas son parte de la cuenca del Río Grande de Arecibo, se terminó de construir en 1942, con el propósito de producir energía hidroeléctrica. Posteriormente, se convirtió también en una de las principales fuentes de agua para el superacueducto, que suministra agua potable para gran parte de la zona norte, desde Arecibo hasta el área metropolitana de San Juan, y zonas de Caguas, Gurabo, San Lorenzo y hasta Las Piedras.

Este embalse nunca se ha dragado y se estima que ha perdido alrededor del 65% de su capacidad debido a la sedimentación.

Además de producir energía eléctrica y agua para consumo de la gente, también es un área recreativa.

Además, existen otros embalses de importancia como Guayabal en Juana Díaz (ha perdido 58.8% de su capacidad), Lucchetti en Yauco (ha perdido 54.6% de su capacidad), El Guineo en Orocovis, Garzas en Adjuntas y Las Curías en San Juan.

Los embalses Loco y Prieto, ambos en Yauco; y Yahuecas, en Adjuntas. habían perdido el 100% de su capacidad.