Varias manifestaciones conmemoraron este viernes el Día Internacional de los Trabajadores en San Juan respetando la normativa sanitaria impuesta por las órdenes ejecutivas de la gobernadora, Wanda Vázquez, para afrontar la crisis de la COVID-19.

La pandemia, que en la isla se ha cobrado 94 muertes y registrado 1,575 casos positivos, además del cierre de las principales vías de la capital que suelen acoger estas marchas, no impidió manifestaciones para protestar contra las condiciones laborales y la falta de medios para hacer frente al coronavirus, pero desde automóviles.

La nota más destacada fue el respeto a la restricciones sanitarias impuestas, por lo que los manifestantes organizaron caravanas de automóviles que se dirigieron ordenadamente al Capitolio, la sede del Ejecutivo.

Marcha de enfermeros

La jornada, anómala por la crisis sanitaria y las dificultades para manifestarse tras anunciar la Policía que se cerrarían avenidas centrales en la capital, comenzó temprano en San Juan con una marcha de enfermeros en una caravana de automóviles para reclamar equipos médicos de garantías para enfrentar la COVID-19 y mejores condiciones salariales.

Decenas de vehículos llegaron hasta las cercanías del Capitolio convocados por el Movimiento Salubrista, donde los enfermeros reclamaron también un aumento de salarios, el cese de los despidos y una mayor fiscalización a la Asociación de Hospitales por supuestos abusos contra los trabajadores.

Los enfermeros, desde sus vehículos para respetar el cumplimiento de las órdenes ejecutivas, mostraron carteles con mensajes como “Necesitamos pruebas de COVID-19, batas, guantes y mascarillas”.

Otra manifestación, con aproximadamente un centenar de vehículos, convocada por asociaciones de maestros, salió del distrito de Hato Rey para terminar también en el Capitolio, donde algunas personas se bajaron de sus automóviles, pero sin organizar grupos para respetar las órdenes ejecutivas.

Marcha en autos de la Federación de Trabajadores

Manifestantes convocados por la Federación de Trabajadores de Puerto Rico (FTPR) marcharon, también en caravana de automóviles, por el distrito de Hato Rey, incluidas las avenidas Ponce de León, Barbosa y Roosevelt, para mostrar su agradecimiento al personal sanitario por su esfuerzo en la crisis.

El presidente de la FTPR, José Rodríguez, rechazó además el anuncio de la gobernadora, emitido el jueves, de una apertura progresiva de la actividad económica por interpretar que es sumamente precipitado.

Rodríguez indicó que el Gobierno no tiene garantías suficientes todavía para asegurar la salud de los trabajadores al no contar con la información necesaria para hacer una reapertura en este momento.

Sostuvo también que Administración de Seguridad y Salud Ocupacional (OSHA) no dispone del personal para hacer cumplir los protocolos de seguridad de COVID-19 en las empresas.

A las manifestaciones se sumará esta noche un “cacerolazo” convocado a las 6:30 p.m. que culminará las marchas de esta jornada.

Habían pedido manifestarse de forma responsable

El secretario del Departamento de Seguridad Pública (DSP), Pedro Janer, había pedido a los ciudadanos que desearan manifestarse que lo hicieran de forma responsable y cumpliendo con las normas de salubridad establecidas.

El funcionario dijo que expresarse de forma ordenada, respetando la necesidad de mantener y cuidar las normas de distanciamiento social y las restricciones a vehículos establecidas para salvaguardar la seguridad de todos sería señal de conciencia civil.

Por su parte, el comisionado de la Policía, Henry Escalera, resaltó que se harían valer los derechos constitucionales, pero a la vez la protección de la salud.

El comandante de la Policía del área de San Juan, Juan José García, dijo que el objetivo de hoy era no intervenir en las marchas, siempre y cuando los manifestantes portaran mascarillas, cumplieran con el distanciamiento social y no bloquearan la circulación, lo que se consiguió.

Marcha virtual

El Movimiento Victoria Ciudadana (MVC) organizó una marcha virtual bajo la consigna “Aislados físicamente, pero en resistencia colectiva” por medio de una serie de actividades en internet, tras invitar a simpatizantes y miembros de la sociedad civil a manifestarse simbólicamente a través de las redes sociales.

La presidenta del MVC, Ana Irma Rivera, exigió, entre otras demandas, equipos protectores para los trabajadores, pruebas masivas para la población y un sistema de salud universal.

Por otro lado, la Asamblea de Pueblo San Juan-Placita Roosevelt (ASPSJ-PR) repudió a través de un comunicado el arresto, que considera ilegal, del activista social y organizador del proyecto Comedores Sociales, Giovanni Roberto Cáez, quien había convocado el lunes pasado, junto a otras organizaciones, la Caravana por la Vida.

En la foto, Edna MeléŽndez, maestra jubilada, participa de una de las caravanas que pasó frente al Capitolio.
En la foto, Edna MeléŽndez, maestra jubilada, participa de una de las caravanas que pasó frente al Capitolio. (Vanessa Serra D’az)

Cáez trataba con esa iniciativa de denunciar la ineficacia gubernamental durante la pandemia de COVID-19 y reclamar alimentos para las personas desempleadas y comunidades más desfavorecidas.

La ASPSJ-PR estima que el arresto fue una indudable violación al derecho constitucional de libertad de expresión.

La jueza Raiza Cajigas determinó que no había causa para arresto por los delitos de obstrucción a la justicia y violación a la Orden Ejecutiva contra Cáez.