La encargada del sistema de rastreo de contactos de personas infectadas por coronavirus, la epidemióloga Jessica Irizarry, reveló este miércoles que son los cumpleaños y los velorios los eventos que han provocado un “conglomerado” de contagios en la Isla.

Solo una tienda por departamentos, de la cual no dio detalles, se ha identificado como centro de contagio en los pasados tres meses en que la pandemia afecta Puerto Rico.

Por estas razones, la experta, quien es gerente en el Crisis Program Management Office del Departamento de Salud, reclamó a las familias que tomen las debidas precauciones a la hora de realizar reuniones.

“Los conglomerados, usualmente, están ocurriendo entre familiares y actividades familiares que se están llevando a cabo. Entonces, las personas que han estado en esos grupos familiares, pues sí hemos podido detectar los contactos, monitorear los contactos y luego verificar cuánto de esos contactos se han convertido en casos”, expuso en entrevista con Primera Hora.

Según especificó Irizarry, uno de los primeros casos de conglomerados surgió en una reunión familiar que se realizó para recordar la vida de un recién fallecido y a la que asistieron 16 personas. Comentó que en este caso se logró identificar al transmisor “índice” y corroborar el contagio de otras “tres a cuatro personas” adicionales.

La epidemióloga Jessica Irizarry, de pie, junto a parte del personal que se encarga del rastreo de los pacientes de coronavirus.
La epidemióloga Jessica Irizarry, de pie, junto a parte del personal que se encarga del rastreo de los pacientes de coronavirus. (Suministrada)

Señaló que en las pasadas semanas los casos más destacados son de cumpleaños.

“Tenemos más de un caso”, sostuvo. “Cuando hacemos la investigación de esos casos y luego nos llegan a nosotros los contactos y hacemos esas entrevistas con los contactos, uno de los problemas principales es que se reúnen en un lugar para una celebración y no utilizan las mascarillas, están a menos de seis pies de distancia. En algunas actividades nos han comentado que han preparado aperitivos en bandejas y las personas se sirven los alimentos de la misma bandeja”.

Agregó que “la recomendación que nosotros damos es que, ahora que se están flexibilizando un poco estas medidas, pues que si se van a hacer estas actividades en hogares y se van a reunir un grupo familiar, pues trate que sea un grupo de no mayor de 10 personas, que mantengan la distancia física, si tienen la facilidad de reunirse en una terraza, en un patio, en áreas que estén abiertas, no áreas cerradas, obviamente (que se practique) el lavado de manos y que los alimentos se sirvan de manera individual, no que se sirvan alimentos donde todas las personas vayan a utilizar una bandeja, a coger esos aperitivos o servirse de la misma olla, que cada cual utilice sus utensilios y no comparta por nada del mundo utensilios, porque estas son situaciones que hemos visto en este tipo de actividades”.

Pese a que desde hace un mes comenzaron a reabrir varios sectores de la economía, Irizarry reveló que no se han detectado casos en zonas en construcción o manufactura. Estas áreas lograron retornar a la economía a principios de mayo, tras una cuarentena obligatoria. Solo mencionó el caso de la tienda por departamentos.

Defiende el rastreo

Antes de revelar los principales centros de contagio, Irizarry defendió el sistema de rastreo de contagios establecido por Salud, el cual ha recibido muchas críticas.

En esencia, este grupo pide a la persona que dio positivo al COVID-19 que identifique con quiénes tuvo contactos de manera regular o por más de 15 minutos. Salud les llama y les exhorta a realizarse la prueba molecular para detectar el virus. Aun salga el resultado negativo, la agencia le da seguimiento diario para evaluar si tiene síntomas de la enfermedad.

Comentó que la oficina cuenta con 26 entrevistadores, un manejador de data, un registrador, dos coordinadores de rastreo de contactos y de sistema de vigilancia de enfermedades respiratorias, así como su experiencia como epidemióloga.

“Hay un equipo bien comprometido de profesionales de la salud que día a día atienden las situaciones. A pesar de que quizás públicamente no se ha expuesto el trabajo que estamos haciendo, pues sí hay situaciones que son bien gratificantes, sobre todo, cuando ese entrevistador hace esa conexión con esa persona que está llamando por 14 días y a veces más de 14 días y las personas se sienten bien agradecidas por el apoyo que le dieron, por las orientaciones y las recomendaciones que le dieron”, resumió.

Sin embargo, la epidemióloga aceptó que hay dos factores que afectan el sistema de vigilancia. Uno es que los laboratorios no están reportando con la rapidez que se amerita los casos positivos de coronavirus al Departamento de Salud. Dijo que esto evita que se contacte a las personas que pudieron contagiarse a causa del positivo con la rapidez que se amerita.

La segunda complicación que identificó es que algunos municipios han comenzado a realizar su sistema de rastreo sin llegar a acuerdos con Salud y se ha duplicado el trabajo.

“Es un poco incómodo estar recibiendo llamadas de dos sistemas para hacer preguntas similares. Podemos llevar esfuerzo coordinados y que ellos nos estén proveyendo información, datos, estadísticas y nosotros no entrar de lleno a realizar lo mismo que están haciendo”, expuso Irizarry.

La gente está cooperando

Las estadísticas del sistema de vigilancia de rastreo de personas que tuvieron contacto con positivos al COVID-19 se publica todos los viernes.

Según el reporte, de los 3,647 casos que se habían acumulado hasta el pasado viernes, la agencia logró contactar a 2,009 personas para comenzar la investigación de contactos. De este grupo, el 74.6% o lo que representa 1,499 positivos les informó de al menos un contacto.

“El 95.7% de los contactos referidos fueron contactados y monitoreados por el equipo de rastreo de contacto”, dice el informe.

El grupo que no fue contactado, unas 148 personas, se debió a que el número telefónico estaba erróneo, no respondió o la personas declinó a participar.

Mientras, de los 1,499 casos investigados, unas 370 personas dieron positivo a la prueba molecular. Esto representa un 10.6%.

En general, Irizarry comentó que han tenido buena respuesta de la ciudadanía para lograr implementar el rastreo de personas que pueden estar contagiadas.

“Hay que agradecer a la ciudadanía, porque ha sido bien cooperadora en el momento que nosotros lo llamamos, le explicamos, verdad, ‘usted ha sido identificado como una persona que estuvo en contacto cercano con un caso positivo a COVID, nosotros somos el Departamento de Salud y vamos a estar dándole seguimiento y vamos a estar apoyándole en este proceso’. Pues, las personas han respondido en su mayoría”, afirmó.