La gobernadora Wanda Vázquez anunció hoy, jueves, un extenso plan para distribuir los más de $2,200 millones destinados para la recuperación de Puerto Rico de los efectos de la pandemia del Covid-19, a través de las disposiciones de la ley federal CARES.

Dichos, fondos, según explicó Vázquez se asignarían tanto a entidades públicas como privadas, incluyendo hospitales, municipios, pequeñas y medianas empresas, entre otros.

El monto total que será distribuido asciende a $2,240,625,863. Deberán ser usados para gastos necesarios relacionados al Covid-19, que no hayan estado presupuestados antes del 27 de marzo pasado, fecha en que se aprobó la ley federal CARES, y además deben ser gastos que se incurran entre el 1 de marzo y el 30 de diciembre del 2020. Los fondos se tienen que usar antes del 31 de diciembre del 2020.

Antes de repasar cómo se haría la distribución de los fondos, la gobernadora recordó que, entre fondos federales y estatales, ya se han desembolsado más de $1,700 millones “destinados para ofrecer un alivio a la ciudadanía”.

“No es suficiente. Tenemos que ir por más. Sabemos que hay muchas personas necesitadas que están esperado la ayuda y estamos trabajando muy fuerte con los jefes de agencia para que nosotros podamos hacer llegar estas ayudas a cada uno de ustedes”, afirmó la gobernaora.

Sobre los fondos de la ley CARES, detalló que $150 millones se usarían para pruebas de Covid-19 y rastreo de contactos, lo que incluirá la compra masiva de pruebas, ampliación del programa de rastreo de contactos y gastos de infraestructura tecnológica.

Otros $150 millones irían a reforzar y brindar liquidez al Fondo de Desempleo del Departamento del Trabajo y Recursos Humanos (DTRH).

Además, irían $100 millones a los municipios para gastos elegibles relacionados con el Covid-19; y otros $100 millones para observar el distanciamiento social y comprar equipos de protección y materiales de desinfección y limpieza para garantizar un retorno seguro a los lugares de trabajo.

Los hospitales públicos recibirán $50 millones; y se destinarán otros $40 millones para el programa de telemedicina.

Una cantidad de $40 millones se destinará para un programa de trabajo y estudio a distancia; $10 millones para atender los gastos relacionados al Covid -19 en las prisiones; $5 millones para un programa de ayuda a personas sin hogar, para compra de equipos, protección, higiene, administración de pruebas de Covid-19 y aislamiento si fuera necesario.

Se creará una reserva para gastos futuros y rembolsos al Fondo General y a la Reserva de Emergencia por gastos elegibles, con una partida de sobre $485 millones.

En cuanto al sector privado, se destinarán $350 millones para un programa de protección de nómina del sector privado, que permitirá rembolso expedito a aquellos patronos que han continuado pagando a sus empleados durante la emergencia.

Habrá $200 millones para un programa de ayuda a los cuentapropistas que permitirá la entrega de un incentivo de $1,000 para los trabajadores por cuenta propia que podrían recibir tan pronto como la próxima semana.

También se destinarán $250 millones para un programa de ayuda a pequeñas empresas (de dos a 49 empleados) que otorgaría un incentivo de $5,000; y $100 millones para un programa de ayuda a medianas empresas (50 a 500 empleados) que otorgaría un incentivo de $10,000.

Además, habrá una partida de $150 millones para los hospitales privados; $50 millones para la industria del turismo; y $10 millones para talleres y adiestramientos a pymes sobre el Covid-19.

La gobernadora subrayó que habría una fuerte fiscalización sobre el uso de esos fondos, que recaería en la Autoridad de Asesoría Financiera y Agencia Fiscal (AAFAF), el Departamento de Hacienda y el Departamento de Salud.

Vázquez subrayó que, aunque hay un plan de distribución de los fondos, eso “no está escrito en piedras”, y según la necesidad de los diferentes sectores, se podría hacer una reprogramación de los fondos.

La gobernadora recordó que “las asignaciones correspondientes a desembolsos de fondos federales, no son automáticos, pues vienen atados a una variedad de parámetros y condiciones del gobierno federal con las cuales cada una de nuestras agencias deben cumplir, antes de que se desembolse el dinero y llegue a las manos del pueblo puertorriqueño”.

Aseguró que, a pesar de esa necesaria burocracia, Puerto Rico y sus agencias ha podido comenzar a desembolsar los fondos de la ley CARES, algo que no han logrado hacer todavía otros estados.

Aprovechó para comunicar que el plan sometido por el Departamento de Familia fue aprobado, y eso permitirá ampliar la cantidad de beneficios y de beneficiarios que podrán recibir el PAN (Programa de Asistencia Nutricional).

La gobernadora sostuvo además que, pese a los serios problemas que ha enfrentado el DTRH con sus sistemas informáticos y la demora en la entrega de asistencias que ha conllevado, la agencia ha procesado 89,400 solicitudes del programa de asistencia por desempleo por la pandemia, conocido como PUA, y cerca de 253,000 solicitudes de desempleo. Agregó que, “al presente, más de 142,000 reclamantes reciben beneficio”. Indicó que el DTRH ha repartido $455 millones adicionales desde el 16 de marzo al presente.

Recordó que, “lo importante es que aquel que cualifique, va a recibir su ayuda (por desempleo) y la misma será retroactiva”.

Entretanto, el doctor Jorge Argüelles, presidente del Centro Unido de Detallistas, celebró la distribución de asistencia, asegurando que ayudará a aliviar la situación de los miles de comercios y pequeñas y medianas empresas que enfrentan un posible cierre.

Por su parte, Jaime Pla, presidente de la Asociación de Hospitales, opinó que la ayuda a los hospitales “le da estabilidad al sistema y permite que podamos seguir teniendo un tratamiento efectivo para los pacientes de Covid, pero especialmente para los demás pacientes de Puerto Rico que ya necesitan servicios de salud y que tienen que ya irse acercando a los hospitales. Así que para nosotros realmente es un fortalecimiento del compromiso de los hospitales de darle servicios de salud al pueblo de Puerto Rico”.

Por otro lado, la gobernadora reiteró el llamado a la población a observar las recomendaciones de seguridad y mantener las medidas de distanciamiento social. Advirtió que “no podemos bajar la guardia”, y aseguró que si se cumplía con las medidas de seguridad “Puerto Rico puede ir reabriendo diferentes sectores económicos. Queremos dar esa oportunidad, pero lo queremos hacer de una manera segura”.