En momentos en que se han registrado varios episodios de inundaciones en distintas partes de la Isla, el director ejecutivo de la Oficina Central de Recuperación, Reconstrucción y Resiliencia (COR3), el ingeniero Manuel Laboy, compartió información sobre decenas de proyectos de mitigación que han sido aprobados y están bajo evaluación por parte de la Agencia Federal de Manejo de Emergencias (FEMA, en inglés).

Esta información, aunque cobra relevancia por los recientes incidentes en varios municipios de la zona norte y este es también pertinente para otras zonas y comunidades que han enfrentado problemas históricos de inundaciones, sostuvo Laboy, antes de entrar en detalles del proceso a través del cual se eligen estos proyectos y se les asignan los fondos para su ejecución.

“No es solo con estos eventos (de lluvias) recientes, pasa cada cierto tiempo. Y creo que hemos reconocido que son situaciones que van a seguir ocurriendo. Y eso está documentado científicamente. De hecho, parte de la política pública, no solo de esta administración del gobernador (Pedro) Pierluisi, también a nivel federal del presidente (Joe) Biden, es que se ha identificado que el cambio climático es el riesgo principal, la amenaza principal de esta generación. Y, afortunadamente, tenemos recursos para atender esto, en distintas instancias”, sostuvo Laboy.

Trabajo anticipado

Usualmente, cuando entra en acción FEMA luego de que ocurren desastres naturales y dan las declaraciones de desastres, de lo que se habla es de reconstrucción y de fondos para atender los daños del evento, sea un huracán, terremotos o lluvias.

Sin embargo, explicó Laboy, bajo la Sección 404 del Stafford Act (Ley Stafford), está el Programa de Asignaciones para Mitigación de Riesgos. “Y es un gran programa, porque no está atado a un daño, sino que tenemos que convencer a FEMA, propuesta por propuesta, que va a atender un riesgo futuro. Y proyectos de control de inundaciones a nivel local, a nivel de un área, cualifican”.

Subrayó, además, que este programa no se limita a control de inundaciones, sino que también se puede usar para financiar programas de energía renovable, vivienda segura, evitar deslizamientos de terrenos, estabilizar suelos, recuperar arrecifes de coral, readaptación estructural de infraestructura, entre muchas otras acciones que puedan ayudar a mitigar un daño futuro. Sin embargo, aclaró, no cubre canalizaciones o construcción nueva de represas.

Explicó que, cada vez que ocurre una declaración de desastre autorizada por el presidente de los Estados Unidos, se asigna, a través de una fórmula, una cantidad de dinero al estado o territorio afectado, para uso bajo el programa de la Sección 404.

Puerto Rico ha recibido asignaciones luego del huracán Irma, el huracán María, los terremotos, la pandemia del COVID-19, y el huracán Fiona. En el caso de María, por la severidad de los daños, la aportación que recibió Puerto Rico fue la máxima posible que se puede otorgar a cualquier estado o territorio.

Así las cosas, la Isla cuenta con un pote que se ha nutrido de las aportaciones de todas esas declaraciones de desastre. Y, por otro lado, el pareo de fondos estatales que exige el programa. Según se anunció recientemente, se está cubriendo con fondos federales de Vivienda de CDBG-Mit, que fueron otorgados también por el desastre de María.

Varios autos quedan atrapados en medio de la inundación reportado el pasado lunes, 6 de noviembre, en una de las entradas al Túnel Minillas.
Varios autos quedan atrapados en medio de la inundación reportado el pasado lunes, 6 de noviembre, en una de las entradas al Túnel Minillas. (Twitter)

Laboy explicó que han dado énfasis al uso de este programa, que a su llegada al COR3 solo contaba con 11 proyectos aprobados, en todas las categorías, y actualmente ya hay 168 proyectos aprobados, de los cuales 48 son de control de inundaciones.

De esos 48 proyectos de control de inundación aprobados, todos excepto uno, están en fase 1, que es la de “diseño, ingeniería, permisos, estudios ambientales”. El otro, que está en la fase 2 de construcción, es un proyecto de control de inundaciones en el centro urbano de Carolina.

La aprobación de fondos para esos 48 proyectos asciende a $172 millones, de los cuales ya se han obligado $37.3 millones.

Además, hay otras 38 propuestas de proyectos de control de inundaciones “que están seleccionadas y activas, en evaluación” ante FEMA, “que totalizan $94 millones”.

Igualmente, hay otros 90 proyectos de control de inundaciones que COR3 alcanzó a incluir luego que FEMA concediera una extensión de tiempo en la fecha límite para someter propuestas.

Las aprobaciones de FEMA, explicó el ingeniero, tardan de tres a 12 meses, o incluso un poco más, dependiendo de la complejidad del proyecto, y toman en cuenta diversos factores, tales como la relación beneficio-costo, a cuántas personas beneficia, si mitiga efectos del cambio climático, si incluye infraestructura critica, que no haya duplicidad de beneficios con otros programas federales, entre otros.

Aseguró que realizar esas propuestas con la debida metodología de FEMA, “es de lo más difícil de hacer” y es por eso que COR3 ha asumido hacer las propuestas para beneficio de los municipios, agencias y entidades sin fines de lucro, porque, además, “no puedes pedir rembolso hasta que no haya una obligación. Y entonces esto era como el huevo y la gallina, si no tienes ese dinero, ¿con qué vas a hacer la propuesta?”.

Entrando en algunos de esos proyectos, Laboy comentó que el del centro urbano de Carolina, que tiene un costo de $24 millones, “es para atender inundaciones históricas en el casco urbano, que afectan no solamente a comunidades aledañas, sino también al Doctor’s Hospital… Así que teníamos doble situación, afecta a comunidades vulnerables y afecta una facilidad crítica”.

“Ese es un gran ejemplo de cómo un alcalde, en este caso del municipio de Carolina, se sienta con el COR3, trabajamos la propuesta, se la sometimos a FEMA, FEMA la aprobó. Cuando yo llegué (a COR3), en el 2021 se aprueba la primera fase. Y entones FEMA le aprueba la segunda fase ahora en verano del 2023″, comentó Laboy, resaltando que al municipio le tomó dos años “hacer todos los planos y toda la etapa de permisos y la parte ambiental”.

“Cuando se acabe este proyecto, que el alcalde había estimado iban a ser como 24 meses, esa área no va a tener más problemas de inundaciones, que llevaba décadas”, afirmó.

Otro proyecto aprobado por FEMA a principios de noviembre, es el de control de inundaciones en Condado.

También están ya aprobados: un proyecto para mejorar el drenaje en el Caño Martín Peña, en el área de Israel Bitumul norte, de casi $35 millones; un proyecto en el área del Río Yagüez, en Mayagüez, de $25 millones, que se aprobó a través del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales; un proyecto en la Avenida Padre Noel, en Ponce, por casi $24 millones.

Además del proyecto en el Caño Martín Peña, hay otros dos que también son de entidades sin fines de lucro; uno de la Fundación Damas en Ponce, “para atender inundaciones en el área del Hospital (Damas) que crean un problema para el acceso a la sala de emergencias”; y otro del Ryder’s Hospital en Humacao, que es “un proyecto de mejora de drenaje y reducción de inundaciones”.

Los otros proyectos son de varios municipios, según las prioridades que han presentado, tomando en cuenta sus respectivos planes locales de mitigación de riesgos.

Tomando uno de esos municipios, Salinas, por ejemplo, tiene un proyecto aprobado en Fase 1, en el sector Santos Amadeo; y otros dos bajo evaluación, en el sector Villa Sol Playita, y en El Coquí San Felipe. Otros tres proyectos también están sometidos, en reserva a la espera de poder entrar a evaluación, en Margarita en la PR-701, en el Sector Mareas, y en la comunidad Playa.

En Canóvanas, por otro lado, se aprobó un proyecto para atender las inundaciones históricas en comunidad de Puente Moreno, según lo estableció como prioridad el municipio; en Quebradillas, se puso como prioridad un proyecto para atender inundaciones en el Puente Blanco que ya está bajo evaluación; y en Aguas Buenas, la prioridad que se fijó fue atender el área del Puente La Charca, por citar otros ejemplos.

En San Juan hay otro proyecto en reserva para atender inundaciones en Puerto Nuevo para estaciones de bombas. Asimismo, en Toa Baja hay un proyecto bajo evaluación para la zona de Levittown, por un monto estimado en $36 millones.

La información sobre los proyectos bajo la Sección 404 está disponible en portal oficial del COR3, incluyendo un mapa con la localización de cada proyecto a través de Puerto Rico. Sin embargo, Laboy aclaró que, debido a la gran cantidad de proyectos en curso y lo oneroso que resultaría una actualización más periódica, la información se actualiza cada tres meses.