En marzo se sabrá cuáles escuelas cerrarán el próximo año escolar
El plan del DE anticipa una reducción de $303 millones en gastos en cinco años.

Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 7 años.
PUBLICIDAD
Tan pronto como en marzo 30 se sabrá cuáles son las poco más de 800 escuelas que permanecerán abiertas para el próximo año escolar, como parte de la reestructuración de esa agencia que actualmente tiene 1,110 planteles.
La secretaria de Educación, Julia Keleher, reiteró hoy que lo que hay detrás de los cambios es "que el sistema llegue a cada niño" y la mejor forma de hacerlo es "optimizar el servicio según el dinero que tengo”.
Este cambió figura como uno de los principales que sufrirá esa agencia y que fue incluido en el plan fiscal que el gobierno entregó recientemente a la Junta de Supervisión Fiscal.
El plan del DE anticipa una reducción de $303 millones en gastos en cinco años que se logrará con la disminución en la matrícula estudiantil, reducción administrativa, jubilaciones y mayor efectividad.
Los ahorros provocarán que se designe unos $6,400 para cada estudiante.
Como parte de sus argumentos para justificar los cambios, la funcionaria recordó cómo en los últimos años ha bajado la matrícula, situación que se agudizó luego del paso del huracán María. Al día de hoy el estimado es de 319,422.
Asegurando que "ahora es el momento" para establecer el nuevo sistema de escuelas en Puerto Rico", Keleher sigue apostando a la “consolidación y movimiento población” de maestros y alumnos.
“Es bueno que el pueblo entienda que todas esas decisiones las vamos a tomar basadas en datos, y la idea es asegurarnos que el dinero disponible, alrededor de $1,600 por estudiante, llegue a ese estudiante y al salón de clases para tener… una experiencia educativa de más alta calidad”, mencionó.
La funcionaria reiteró que ahora “no hay chavos para los estudiantes por que la mayoría se destina a la nómina”.
Mostró ejemplos donde en muchas escuelas, el gasto de nómina y administración llega a un promedio de 90%.
“Mi sugerencia es llevar a la población a un número que puedas gastar 75% o menos en nómina y administración y el 25% para compras de libros...”, indicó al denunciar que el sistema actual no es “equitativo” y que “no hay rendición de cuentas”.
En cuanto a los criterios que usarán para cerrar planteles, Keleher aclaró que "vamos a identificar las escuelas que se van a quedar, según la población que puede ocupar ese espacio que me permite optimizar el uso de los fondos disponibles".
Mencionó como requisitos, "la seguridad de la escuela, dónde está; la distancia entre una y otra; la planta física; la capacidad, ¿cuántos niños caben ahí?; la matrícula; accesibilidad; aprovechamiento académido y servicios a estudiantes de educación especial”.
Precisamente en el sector de educación especial también ha disminuido la matrícula -la baja fue estimada en unos 8,000- y Keleher quiere hacerlo más costo-efectivo para ofrecer mejor servicio.
“Entendemos que el Departamento (de Educación) nunca ha recibido la cantidad que necesita para proveer 100% de los servicios que necesitamos. Para ese grupo vamos a intentar reubicar las poblaciones de manera en que haya más economía en término de cómo contratar servicios y cuántos niños pueden beneficiarse del mismo”, mencionó.
Uno de los pilares más importantes dentro del sistema de educación son los maestros.
La secretaria lo reconoció y les demostró “respeto y empatía” pero advirtió que “mi deber es manejar los recursos de manera que beneficien al estudiante. Mi norte es qué necesitan esos 319,000 estudiantes que están bajo mi cargo; y que yo tengo que asegurarme que tengan un maestro. Eso viene antes que nada”.
Al lamentar que para muchos maestros la situación de reubicación no será fácil, reiteró que se proyectó en el plan fiscal un aumento de $1,500, al año, a partir de agosto próximo.
“No tengo problema en seguir trabajando para que se le pague más y quizás se le pueda disminuir el impacto de que uno tenga que bajar más lejos… Yo entiendo mi deber hacia ellos y sus derechos no quiero violarlos, pero tengo una encomienda con los 319,000 niños”, acotó.
En cuanto a un posible aumento a los directores escolares, tampoco lo descartó.
Sobre los 3,500 empleados transitorios, la mitad de los que había el pasado año, Keleher anticipó que “tan sólo vamos a contratar con los recursos que necesitamos, según la matrícula. Todo va dirigido a lo que necesita el estudiante. Empiezo y termino en ese punto”, advirtió.
Aclaró que muchos de estos serían readiestrados según las necesidades.
Finalmente, Kelejer le dijo a la gente que “tengan fe y crean que todo este proceso valdrá la pena, porque en algún momento vamos a recibir (fondos) de la Agencia Federal para el Manejo de Desastres (FEMA) para reconstruir este sistema de educación”.
Sobre la reconstrucción de planteles con esos fondos que alcanzarían $8.4 billones, la funcionaria aceptó que es un proceso que conlleva varias etapas y que para el 2019 se podría estar trabajando con los proyectos.