La Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos (EPA, por sus siglas en inglés) anunció hoy la otorgación de $10.6 millones en subvenciones para ayudar a las comunidades costeras y de los Grandes Lagos a proteger la salud de los bañistas este verano. De estos, $653,000 se destinarán a Puerto Rico ($344,000) y las Islas Vírgenes de los Estados Unidos ($309,000), siempre y cuando cumplan con los requisitos de elegibilidad. Los fondos ayudarán a los estados, tribus y territorios a realizar programas de monitoreo de la calidad del agua y notificación pública para sus playas.

“Muchas personas pasan tiempo en el verano disfrutando de actividades acuáticas, en su playa favorita, razón por la cual la EPA está proporcionando más de $10 millones para ayudar a los estados y socios locales a monitorear la calidad del agua”, comentó la subadministradora de Agua de la EPA, Radhika Fox. “Estas subvenciones ayudan a los estados, tribus y territorios a financiar programas a fin de garantizar que nuestras aguas costeras sean seguras para nadar y recrearse”.

Según la Ley de Evaluación Ambiental de Playas y Salud Costera (BEACH, por sus siglas en inglés), la EPA otorga subvenciones a los estados elegibles, solicitantes tribales y territoriales para ayudarlos a ellos y a sus socios del gobierno local a monitorear la calidad del agua en las playas costeras y de los Grandes Lagos. Cuando los niveles de bacterias son demasiado altos para nadar de manera segura, estas agencias notifican al público y publican advertencias o cierres de playas.

Desde 2001, la EPA ha otorgado casi $216 millones en subvenciones de la Ley BEACH para analizar las aguas de las playas en busca de bacterias causantes de enfermedades y ayudar con la notificación pública y la identificación del problema. Este programa es esencial para proteger la salud de los bañistas en todo el país.